María Verdoy da la bienvenida a la nueva etapa de ‘Socialité': “La esencia continúa”

Si el tejido coral de la vida se confecciona con hilos de cambios, la televisión no iba a ser menos. Este fin de semana se ha producido uno de esos que marca historia, en cierta parte, para un programa que ya es un clásico de la televisión: Socialité, que llevaba funcionando siete años bajo el sello de La Fábrica de la Tele, ha sido traspasado a Fénix Media, compañía audiovisual liderada por Christian Gálvez. Si bien se efectuó el sábado dicho movimiento, no ha sido hasta este domingo cuando se ha estrenado el formato, comandado por María Verdoy, con la nueva productora.

Toda una trama empresarial que viene a reducirse, como todas las cosas bellas y elegantes, a un ramo de flores y unas palabras cariñosas. Cuando la presentadora ha dado inicio a la emisión del programa, se ha dirigido a todos los telespectadores, consciente de que la noticia ha sido todo un terremoto en el periodismo que cubre el mundo televisivo, para expresar el compromiso de Fénix Media con el proyecto y la ilusión que merece despertar este nuevo comienzo.

“Juntos empezamos este fin de semana una nueva etapa y tenemos muchas ganas de que sea una etapa con mucho color y con muchas alegrías”, iniciaba su speech la conductora del espacio, que, después, resumía en una frase todo lo que hay que entender de la vida y, en concreto, de aquello que se produce detrás de las cámaras y de las escaletas y que da forma a este programa —a todos, en realidad—: “La televisión cambia, pero la esencia de Socialité continúa”.

Crónica de una venta anunciada

Lo cierto es que, aunque haya permanecido ejerciendo su labor hasta este fin de semana, La Fábrica de la Tele anunció su ruptura con Socialité a finales del pasado año; no ha sido la sorpresa de gran magnitud por la separación de caminos en sí, que ya se sabía, sino por la entrada de Fénix Media en el entramado.

El traspaso debe enmarcarse en la doctrina que Mediaset asumió a finales del pasado año, materializada en el corte de lazos con La Fábrica de la Tele —que también estaba detrás de otros programas de la cadena, como Sálvame— y que se tradujo, a ojos del espectador, en la partida de María Patiño y Nuria Marín, vinculadas por contrato con la empresa, y la llegada de Verdoy, quien, con un ramo de flores sobre la mesa, avanza la buena nueva de esta época recién estrenada.