La sorprendente casualidad entre dos solteros en ‘First Dates’: “Por favor, que no sea él”
Sandra, una tatuadora de 34 años, coincidió por sorpresa con su pretendiente de camino al programa. “Es la típica persona que te encuentras y como que...”.
First Dates es uno de los programas de la televisión que siempre deja momentos virales gracias a las anécdotas de los solteros y solteras que buscan el amor a primera vista. Esta vez los comensales que se han convertido en los grandes protagonistas han sido Sandra y Benjamín.
Esta primera, una tatuadora de 34 años, que se considera una persona “intensa”, tiene una dilatada experiencia en el terreno del amor después de estar más de una década con su última pareja, con la que dio el ‘sí quiero’ y tuvo un hijo, que actualmente tiene seis años. La soltera aseguró en su presentación que se encontraba en la búsqueda de un hombre con pensamiento feminista. “Me gusta tanto si conozco a un hombre como a una mujer que sean feministas”, manifestó.
Benjamín, de 43 años y también amante de los dibujos corporales, indicó su deseo de encontrarse con una mujer elegante y romántica en su periplo por el restaurante de Carlos Sobera. Sin embargo, las ganas de ambos por conocer la identidad de su cita se hicieron notar, pero la primera toma de contacto no fue como muchos esperaban a raíz de una sorprendente casualidad.
“Lo he visto en el tren”
Sandra, que se quedó sorprendida tras la llegada del soltero, confesó que había coincido con él en el tren que ambos tomaron desde Salamanca para dirigirse a la capital española, lugar donde se graba el programa. “Al venir aquí creo que hemos coincidido en el tren y lo he visto antes de subir”, explicó.
De hecho, su primer encuentro lejos del restaurante no fue del todo positivo, ya que ella pensó que era la “típica persona con la que no tienes nada en común”. “Encontrármelo aquí de sopetón ha sido como uffff, no por favor que no sea él”. Esto no es todo, la joven tatuadora escaneó a fondo a su pretendiente con el objetivo y sacó una evaluación, que seguro que no hizo mucha gracia a Benjamin.
“Tiene pinta de ser la típica persona que carraspea y tira el mocarro en el tren”, dijo sin ningún tipo de tapujos. No obstante, la originalidad de Sandra fue una de las cosas que más llamó la atención del soltero, donde aseguró que ese tipo de personas son las que le llaman la atención. “Es lo que me gusta a mí y con esa persona me quedaría yo”.
No obstante, la cena se desarrolló en un ambiente agradable, ya que ambos conectaron bien, aunque tomaron la decisión de marcharse por caminos diferentes.