La rechazada en ‘La isla de las tentaciones’ que es viral por su error en ‘First Dates’

El destino, o algún trabajador muy avispado, consiguió la pasada noche que una persona estuviera en dos canales de televisión diferentes prácticamente al mismo tiempo y en ambos como protagonista. Yuleima Sosa, una de las solteras de la quinta edición de ‘La isla de las tentaciones’, fue nombrada por todos sus compañeros después de que los solteros decidieran que ella debía ser la que abandonara República Dominicana. La canaria, de 22 años, acudía al formato presentado por Sandra Barneda para buscar el amor y tentar a los concursantes, pero finalmente solo pudo disfrutar de “amistad” y ninguno de los participantes la eligió para una sola cita.

Pero su cara no pasó desapercibida cuando las cámaras la enfocaron, pues en las redes sociales muchos se percataron de que había aparecido tan solo unos minutos antes en Cuatro buscando el amor otra vez en ‘First Dates’. Su frase para presentarse ya dio mucho que hablar: “Si yo soy un pibón tengo que estar con un pibón. Solo he estado con un feo dos años porque me tenía el bolsillo lleno”, aseguró. Le tocó cenar con Hipólito, pero las cosas no empezaron nada bien porque no sabía dónde se encontraba la ciudad de la que procedía su cita.

Y no era algo remoto ni complicado, pues Hipólito, natural de Argentina, llegaba desde Valencia y Zuleima es estudiante de Turismo. Pero cuando desveló la ciudad, la cara de la joven cambió y solo acertó a decir una frase que ya es viral: “Eso está para abajo, ¿no? Eh... ¡Andalucía!”, espetó. En los totales se defendió porque no quería quedar como “una inculta”: “Yo no sé ubicar las provincias, el mapa... No sé”, sentenció.

El argentino no quiso ser borde y le explicó, más o menos, dónde se encuentra Valencia: “Al lado de Barcelona”. Y así, confesando que sabía que “Madrid queda en el centro de la península”, comenzaba la cita para una Yuleima que terminaría con un buen sabor de boca. Tanto ella como Hipólito disfrutaron de la velada y quedaron en tener una segunda cita, sobre todo por la atracción sexual que tuvieron el uno por el otro.