La esposa de Casemiro, “molesta” por la obsesión del jugador por el fútbol

Carlos Henrique Casemiro comienza a abrirse hueco en el Manchester United. El cinco veces campeón de la Champions League, desde el parón de selecciones, ha aumentado considerablemente su presencia sobre el verde y ha sido titular en los tres últimos partidos del equipo dirigido por Ten Hag. La pasada noche incluso estuvo a punto de firmar su estreno goleador con los Red Devils con un auténtico golazo ante el Omonia Nicosia, pero su disparo se fue ligeramente alto. El centrocampista brasileño es un trabajador incansable y sus esfuerzos van siendo recompensados. Y es que es tal su obsesión por el fútbol y por mejorar su rendimiento que su pareja comienza a estar harta.

Casemiro habló con los medios de comunicación oficiales del United y confesó que siempre revista las estadísticas y analiza las imágenes después de los partidos: “Las miro mucho y lo disfruto. Creo que veo tres o cuatro veces mis partidos. Es la forma en que aprendes y te desarrollas corrigiendo errores. Creo que es clave para seguir evolucionando en el fútbol”, declaró. “Veo mucho fútbol. Me encanta. Mi esposa se molesta un poco porque en casa solo hay fútbol. El fútbol es mi pasión, es mi alma, y creo que esa ha sido la clave de mi éxito. Me encanta el fútbol. Me encanta ver fútbol”.

La historia de amor de Casemiro y Anna Mariana

Los dos brasileños se conocieron en 2011, cuando el futbolista todavía defendía la camiseta del São Paulo. Tres años más tarde se casaron en una espectacular boda celebrada en Brasil con más de 500 invitados y un gran despliegue por parte de la pareja. Antes de pasar por el altar, Anna Mariana, que es tres años mayor que Casemiro, estudió Administración y Dirección de Empresas y poco después lanzó su propio negocio como maquilladora.

Juntos llevan más de diez años y tienen dos hijos en común: Sara, de seis años, y Caio, el pequeño de la casa de tan solo un año. El futbolista les dedica a menudo algunos mensajes en las redes sociales y posa con ellos, de igual manera que con Anna Mariana. La brasileña siempre ha apoyado a su marido allá donde ha ido y hace tan solo unos días la pudimos ver en las gradas acompañada de sus pequeños para ver el Brasil-Túnez en el Parque de los Príncipes de París.