Las exigencias de Shakira cuando duerme en la mansión que compartía con Piqué

Shakira sigue dolida tras su complicada y pública ruptura con el exfutbolista del Barcelona Gerard Piqué y así lo demuestra con sus actos. Y es que, tal y como han contado en Antena 3, la cantante colombiana tiene una serie de exigencias para sus empleados cada vez que se hospeda en su antigua casa de Barcelona que hacen pensar en el dolor que debe de seguir sintiendo por el desamor.

Al parecer, la artista no querría estar en contacto con ninguno de los enseres que hubiera tocado Clara Chía, la joven que ahora es pareja del padre de sus hijos. Tal es su obsesión que avisa con tiempo de sus estancias en la mansión, que disfrutan a turnos, para que sus empleados puedan tirar sábanas, cojines, cubertería y demás cosas que haya podido rozar la catalana.

Unas peticiones que no hacen más que sacar a luz el dolor que artista sigue sintiendo por el desamor con el futbolista, por quien se mudó a la Ciudad Condal para formar una familia y dejó su carrera en la música un poco de lado.

Por qué no han vendido la casa

Pese a que Shakira y Gerard Piqué han llegado a muchos acuerdos tras su separación, como en lo referente a la custodia de sus hijos, todavía mantienen en común la propiedad de esta vivienda en Esplugues de Llobregat, cuyo límite con la casa de sus suegros, de quienes la colombiana se ha acordado en sus canciones.

De acuerdo con la información de Antena 3, la razón de que no se haya podido vender todavía es el elevado precio con el que salió al mercado. Mientras que el futbolista habría sugerido rebajarlo, la de Barranquilla se habría negado con intención de “fastidiar”.

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