Eurovisión censura el apoyo a Palestina del sueco Eric Saade
Las redes sociales del festival han eliminado la actuación inaugural del artista, que cantó con un pañuelo palestino en la mano.
Tal y como era previsible, los primeros gestos en apoyo a la causa de Palestina en el festival de Eurovisión no se han hecho esperar. El artista Eric Saade, responsable junto con Eleni Foureira y Chanel de la actuación inaugural del evento y representante de Suecia en 2011, contó ‘Popular’ con un chal palestino enredado en la mano.
Saade, de origen palestino por parte de padre, es uno de los artistas que más abiertamente se ha posicionado con respecto a la polémica participación de Israel en el certamen. No es la primera vez que lamenta públicamente que Israel y su propuesta, ‘October Rain’, puedan formar parte del concurso.
La respuesta del festival no se ha hecho esperar y la actuación, junto con la de Chanel y la de Foureira, ha sido eliminada de todos los canales oficiales del certamen. Tampoco le gustó el gesto a la Sveriges Television. “Su gesto viola las pautas de la EBU sobre no realizar ningún acto de carácter político en la competición. Saade es muy consciente de las reglas y creemos que es triste que explote su participación de esa manera”, ha opinado la productora ejecutiva, Ebba Adielsson.
En la misma línea se ha posicionado una portavoz de la Unión Europea de Radiodifusión, la entidad organizadora del evento. “El Festival de Eurovisión es un espectáculo de televisión en vivo. Todos los intérpretes son conscientes de las normas del concurso, y lamentamos que Eric Saade haya decidido comprometer la naturaleza no política del evento”, subrayó.
A pesar del posicionamiento oficial trasladado por la UER, el gesto de Saade ha sido especialmente aplaudido en las redes sociales. El protagonista, en su cuenta de Instagram, ha publicado un recordatorio. “Es solo amor unido por la música”, escribió.
La participación de Israel
La representante de Israel en Eurovisión, Eden Golan, confesó en una entrevista en ‘Israel Hayom’ estar preparada “para las cosas malas que sucederán”. La presencia del país en el certamen ha desencadenado una fuerte corriente de opinión totalmente contraria a su participación, más aún después del reciente rechazo del alto al fuego y su ataque a Rafah.
Para eludir que ese conflicto se trasladara a las gradas del Malmö Arena, la organización ha impedido la entrada de banderas o pancartas que impliquen cualquier tipo de significado político. Sin embargo, a la vista está que hay gestos que son imposibles de evitar y que podrían magnificarse con la participación de Israel en la segunda semifinal del jueves.
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