Elizabeth Berkley, la actriz de ‘Salvados por la campana’ que pagó caro su paso al cine erótico
La actriz cayó en el ostracismo por su participación en ‘Showgirls’, cinta de Paul Verhoeven que pretendía repetir el éxito de ‘Instinto básico’.
En la historia del cine hay papeles que te catapultan hacia el estrellato o que te condenan al ostracismo. Y en ocasiones, la línea que divide el éxito y el fracaso es complicada de distinguir. Elizabeth Berkley es el ejemplo de actriz que ha vivido las dos caras de la misma moneda, aunque la gloria fue efímera para ellas.
En 1989, la actriz, junto con el resto del elenco de Salvados por la campana se convirtieron en algunos de los rostros más reconocibles para varias generaciones, que crecieron en cierto modo con las aventuras de unos jóvenes en el instituto Bayside. Y Berkley (Jessie Spano) supo aprovechar su oportunidad hacia la gracias a las cuatro temporadas de la ficción.
Una vez concluyó su periplo en la serie en 1992, el siguiente paso lógico para ella era intentar quitarse de encima esa imagen de adolescente para comentar a explorar una versión más adulta de ella misma que le abriera de par en par las puertas de Hollywood. Pero, como decíamos, hay decisiones que marcan y su apuesta por Showgirls (1995), con la perspectiva del tiempo, no fue la mejor para su carrera.
A priori, ponerse en las manos de Paul Verhoeven, que venía de arrasar con Instinto básico y de colocar a Sharon Stone entre las actrices más cotizadas, no parecía mala idea, pero el thriller erótica fue en su momento un rotundo fracaso y quien más salió perdiendo fue, injustamente, Berkley. “Era una época diferente. No sé si la película habría sido recibida con la misma dureza ahora. Realmente no lo sé”, señalaba la actriz en declaraciones a Collider, donde reivindica su trabajo.
Y es que lo cierto es que con el paso de los años, Showgirls se convirtió en una película de culto. “Aprecio enormemente que esta película que la gente destrozó con tanta crueldad, sea tan interesante y fascinante ahora y haya tenido un gran impacto en la cultura pop. Me encanta que se haya convertido en un clásico de culto”, explicaba la actriz.
“Ha sido un viaje. No me arrepiento. Sólo desearía que hubiera sido un poco más fácil en su momento, pero todos pasamos por altibajos. Todos pasamos por cosas. Y mi experiencia fue muy pública. Siendo una mujer muy, muy, muy joven, tuve que aprender cosas que tal vez fueron duras o difíciles, pero las superé y salí mejor y más fuerte, en todos los niveles, pero esa fue mi elección y mi propio crecimiento personal, en ese momento”, añadía Berkley, que sin embargo tuvo problemas para encontrar su sitio en la industria.
Un domingo cualquiera (1999) y La maldición del escorpión de Jade (2001) supone quizá lo más destacado de su carrera post Showgirls, al menos en cuanto a nombre, aunque compaginó películas de serie b con papeles en varias series. En este sentido destaca su participación en dos temporadas de CSI Miami hace más de una década, aunque fue el inicio de otra etapa de su carrera menos productiva y en la que las oportunidades de trabajar disminuyeron. Más suerte tuvo sobre las tablas ya que sus papeles en Lenny, Sly Fox o Hurlibury cosecharon buenas críticas.
En cualquier caso, la serie que le dio la fama es la que ha vuelto a ubicarla en el mapa ya que Salvados por la campana regresó en 2020 con parte del elenco original, aunque este mismo año se confirmaba que no habría tercera temporada de la ficción. El próximo proyecto en el podremos ver a la actriz será la serie The Idol (HBO), del creador de Euphoria, que confirma que Berkley sigue al pie del cañón a sus 50 años.