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El mensaje que envió Daniel Sancho tras cometer el crimen: “Mándame unos mercenarios”

Según ‘Ok Diario’, el chef hizo esta petición a un amigo justo antes de ingresar en la prisión de Koh Samui y que le privaran del teléfono.

Un mes después de la muerte de Edwin Arrieta y con la investigación cerrada por parte de la policía, todavía se siguen conociendo escabrosos detalles de los momentos posteriores a que Daniel Sancho cometiera el asesinato en Tailandia. Minutos después de perpetrar el crimen, el hijo de Rodolfo Sancho llamó a algunas personas de su entorno supuestamente para confesar que había matado a Edwin de un golpe y envió algunos mensajes para informar sobre la delicada situación que iba a vivir en el país asiático y así pedir ayuda.

Según publica este lunes Ok Diario, antes de que la policía le retirara definitivamente su teléfono, Sancho consiguió enviar un sorprendente mensaje en el que ya sabía en qué cárcel iba a ingresar: “Mándame unos mercenarios a la cárcel de Koh Samui”, le escribió a un amigo siempre según la información del mencionado medio.

El código penal en Tailandia es popularmente conocido por su dureza y los investigadores ya habrían amenazado a Sancho con las consecuencias que tendría si no confesaba y colaboraba con la investigación. Quizá por eso el español ya sabía la que se le venía encima, pues un asesinato tan cruento en dicho país puede suponer como mínimo quince años de cárcel, aunque también puede ser cadena perpetua o incluso la pena de muerte.

Para cuando envió el mensaje, Daniel Sancho ya acumulaba innumerables interrogatorios por parte de las autoridades tailandesas, que finalmente decidieron llevarle a un restaurante de lujo para ganarse su confianza y que confesara todos los detalles del crimen contra Edwin Arrieta. Cabe recordar que después hizo una reconstrucción de los hechos que la policía tailandesa filtró a los medios de comunicación así como un dibujo en el que enseñaba con detalle cómo había descuartizado el cadáver del colombiano.

El dinero, un problema serio

Daniel Sancho ya tiene en Tailandia a sus padres, Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo. Ella le ha visitado en una decena de ocasiones y le ha llevado algunos objetos para ayudarle en su estancia en la cárcel, además de entregarle dinero para poder vivir un poquito mejor entre rejas. Sin embargo, Rodolfo se vio obligado a retrasar su viaje al sudeste asiático supuestamente por motivos económicos. Y es que los billetes de avión, el alojamiento en Tailandia, los abogados tailandeses y los servicios Carmen Balfagón y Marcos García Montes están siendo un quebradero de cabeza para la familia Sancho, que podría encontrar un nuevo frente abierto con la indemnización que va a pedir el entorno de Edwin Arrieta y cuya suma podría ascender hasta los 500.000 euros.

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