SUCESOS

El actor Mitchel Musso, detenido por robar una bolsa de patatas fritas

El intérprete, conocido por su papel en ‘Hannah Montana’ y en otros formatos de Disney Channel, niega los hechos pese a pagar una fianza de 922 euros.

El actor Mitchel Musso, que saltó a la fama por su interpretación de Oliver Oken en la serie de Hannah Montana, fue detenido la semana pasada y encarcelado brevemente en Rockwall (Texas) por robar una bolsa de patatas fritas de forma agresiva en un establecimiento local. Pese a que tuvo que pagar una fianza de 1.000 dólares para salir del calabozo (922 euros al cambio), Musso ha negado los hechos en una entrevista en People.

Al parecer, según la versión oficial, el actor que dio voz también a Jeremy Johnson en Phineas y Ferb, entró en estado de embriaguez a un hotel, cogió una bolsa de patatas fritas y empezó a comérsela sin pagarla. Cuando le pidieron que lo hiciera, “se volvió verbalmente abusivo y se fue”. Inmediatamente llamaron a la policía, que abordó al actor en la calle y lo detuvo por “intoxicación pública y robo por valor menor a 100 dólares”.

“Fue transportado al Centro de Detención del Condado de Rockwall, donde fue ingresado por los cargos enumerados anteriormente. El Sr. Musso pasó una noche en la cárcel y salió bajo fianza el domingo por la tarde después de pagar una fianza de $1000.00″, agrega el comunicado de prensa del Departamento de Policía Local.

Niega los hechos

Sin tapujos, Musso niega categóricamente los hechos e, incluso, los describe de una forma totalmente diferente. “No hubo ningún robo y no estaba en estado de embriaguez. Ha sido simplemente desafortunado, pero es un gran malentendido”, asegura en una entrevista publicada en People.

Según su versión, entró en el hotel después de cuatro horas surfeando sin camiseta y con unos pantalones cortos. “Este empleado descontento, cuyo comportamiento tampoco era correcto, me arrancó la bolsa de patatas fritas de la mano y me gritó por mi vestimenta”, recuerda subrayando que quiso pagar la bolsa de patatas fritas pero que, ante la amenaza sobre llamar a la Policía, le instó a que lo hiciera.

“Da miedo estar rodeado por treinta policías. Es una situación aterradora. No tenía nada que decirles, porque sabía lo que estaba pasando. Me llamaron por mi nombre, sabían quién era yo porque esta es mi ciudad”, expuso más tarde opinando que su condición de famoso influyó directamente en los hechos. Un suceso con el que incluso Musso bromea. “En la cárcel me dieron patatas fritas para cenar, así que las conseguí gratis al final”, zanjó.

Sigue a Tikitakas

Lo más visto

Más noticias