Sale a la luz el dinero que Sancho recibe de su madre
El programa ‘Así es la vida’ de Telecinco ha accedido al registro de los ingresos que ha hecho Silvia Bronchalo en la prisión tailandesa de Koh Samui.
Daniel Sancho parecía un joven que lo tenía todo: un chico guapo, con pareja, con padres en buena posición económica y un trabajo. Pero todo se truncó a comienzos de mes, cuando, de acuerdo con su confesión, asesinó y descuartizó en Tailandia al cirujano colombiano Edwin Arrieta, con quien presuntamente mantenía una relación: “Yo era su rehén”, llegó a decir.
Tras testificar ser el culpable del grave crimen, su vida dio un vuelco e ingresó en la prisión local de Koh Samui, con unas durísimas condiciones y muy lejos de lo que sería un centro penitenciario en España. Mientras espera que termine la instrucción del caso y se celebre el juicio, donde con toda probabilidad la Fiscalía pedirá la pena de muerte para él por considerar los hechos un asesinato con premeditación, duerme en el módulo de enfermería junto con otros cuatro reos.
Un descanso que será escaso, ya que no tienen camas como tal, sino que se tumban sobre delgadas colchonetas. Tampoco tienen radio o televisión, aunque esporádicamente ven películas en tailandés. Y la comida es más bien de mala calidad y escasa, algo a lo que su madre ha querido poner remedio ingresándole dinero para que pueda adquirirla.
El registro de los ingresos
El programa Así es la vida de Telecinco ha tenido acceso a los registros de los ingresos que ha hecho Silvia Bronchalo en su visita a la prisión para encontrarse con el chef español. La otrora actriz ha depositado un total de 4.000 bats para él, que al cambio son poco más de 100 euros.
No obstante, Sancho no los puede gastar del tirón. Tiene un límite máximo para usar al día de 13 euros. Con ellos puede adquirir comida extra que encargaría al exterior, mediante carta, ya que no existe la figura del economato como en las prisiones españolas.
Asimismo, su madre podría haber introducido también tanto comida como bebida de fuera de la cárcel, ya que eso está permitido.