Caso Alves: qué podría pasar en el juicio y por qué solicita el atenuante del alcohol

Ante la con toda probabilidad sentencia condenatoria para Dani Alves, quien se encuentra en prisión provisional desde hace casi un año (entró el pasado 20 de enero) después de ser denunciado por una mujer que dice que este la agredió sexualmente en el baño del reservado de la discoteca Sutton de Barcelona en la noche del 30 de diciembre de 2022, su defensa, encabezada por la abogada Inés Guardiola, ha solicitado que se le aplique el atenuante de estar bajo los efectos del alcohol para reducir la pena.

Una medida mitigante frente a un horizonte que todo indica que traerá una sanción penal para el futbolista brasileño, quien ha dado ya hasta cinco versiones de lo sucedido aquella madrugada. Tras la denuncia de la chica, que entonces tenía 23 años, dijo que (1) no la conocía, para posteriormente, en función de las diferentes pruebas que iba recopilando la investigación de los Mossos d’Esquadra, cambiar a que (2) se encontraron en el baño, después a que (3) ella le practicó una felación consentida, más tarde a que (4) habían mantenido relaciones consentidas, y, ahora, a que (5) tuvieron sexo, pero él estaba bajo los efectos del alcohol.

Porque este ir y venir de versiones al jugador no le beneficia en absoluto de cara a la decisión de la corte, ya que le resta credibilidad frente a la presunta víctima, que siempre se ha mantenido firme en su testimonio. “Él puede aportar las declaraciones que considere oportunas en función de sus intereses. Pero lo recomendable, desde el punto de vista de la defensa penal, es hacer únicamente una declaración cuando se conozca el resultado de todas las diligencias, porque el problema de declarar varias veces durante la instrucción del proceso es que entra en contradicción. Si, por su parte, el testimonio de la víctima es consistente a lo largo del procedimiento, tiene mucha base para que la sentencia sea condenatoria”, apunta el abogado César Lage, del despacho Valiñas & Lage.

“El hecho de que el investigado cambie la declaración varias veces es perjudicial porque le resta credibilidad, más cuando las diligencias y actividades probatorias (informe forense, vídeos de las cámaras de seguridad, pruebas de ADN…) están corroborando la versión de la presunta víctima. Por ello, con toda probabilidad, la sentencia tenderá a ser condenatoria”, agrega el especialista en derecho penal.

De qué le sirve decir ahora que estaba bebido

Rematada la instrucción del caso, llega el momento en el que las partes envían al tribunal sus peticiones. La Fiscalía ha solicitado nueve años de prisión para el futbolista, mientras que Ester García, abogada de la víctima, se ha decantado por la pena máxima para el delito de agresión sexual con penetración: doce años (el art. 179.1 del Código Penal indica que la pena puede ir de cuatro a doce años). Inés Guardiola, por su parte, mantiene la petición de absolución para su cliente, pero, subsidiariamente, solicita que, en caso de resultar condenado, se le aplique la atenuante de que estaba bajo los efectos del alcohol y no era dueño de sus actos.

“De declararlo culpable y aceptar el tribunal esta medida mitigante de la sanción, Dani Alves podría ver su pena reducida gracias al atenuante que se recoge en el artículo 21.2 del Código Penal, en relación con el artículo 20.2, por lo que debe aplicarse el 66.1.1, el cual indica que la pena para aplicar sería la mitad inferior de la que se fije para el delito; es decir, la condena oscilaría de cuatro a ocho años”, explica Lorena Rodríguez, letrada penalista del despacho antes citado.

Cómo demostraría Alves que iba bajo los efectos del alcohol

Mientras que la joven acudió a urgencias para ser examinada la misma noche del 30 de diciembre de 2022, tras activarse desde la discoteca el protocolo de agresiones sexuales, Dani Alves se marchó del local y no fue detenido hasta días después, por lo que no hay ningún análisis que pueda demostrar que este se encontraba esa madrugada bajo los efectos del alcohol.

Entonces, ¿cómo puede su defensa acreditar que este iba bebido esa madrugada? Ahí es donde entrarían en juego los testigos y las facturas de las consumiciones en la discoteca. En el caso del jugador brasileño, Inés Guardiola ha pedido que su actual esposa, la modelo tinerfeña Joana Sanz, quien ha desactivado sus redes sociales, acuda como testigo al juicio. Ella podría manifestar allí que el jugador la llamó para confesarle que le habría sido infiel porque no tendría control de sus actos al encontrarse ebrio.

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