Cándido Conde-Pumpido, sobre la mujer que lo denunció: “Estaba celosa de Lara Dibildos”

Cándido Conde-Pumpido rompió anoche su silencio con una entrevista en el plató de programa De Viernes de Telecinco después de que se archivase la causa contra él tras ser denunciado por agresión sexual por una mujer brasileña llamada Aline, quien finalmente retiró en noviembre la denuncia interpuesta contra el abogado, a la sazón, hijo del presidente del Tribunal Constitucional, del mismo nombre.

Tras el sobreseimiento de las acciones por parte del Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid, el letrado quiso dar su versión de lo ocurrido, por considerar que afectaba reputacionalmente a su familia, con larga trayectoria jurídica. En el espacio de Telecinco contó que la joven le había denunciado porque “sentía celos de Lara Dibildos”, con quien el abogado mantuvo una relación sentimental.

“Fue un infierno verme esposado y estar retenido en un calabozo”, dijo Conde-Pumpido, quien fue detenido tras la denuncia de la joven junto con otros dos amigos, a quienes esta acusaba de violación grupal.

“Lara y yo rompemos en torno a mediados de octubre y días después conozco a esta persona en la puerta de un local de Madrid, parece ser que ella tiene interés en mí y acabamos en mi casa como una noche normal, en ese momento no hubo ningún tipo de relación sexual”, contó.

“Yo en ese momento no estoy bien por la ruptura con Lara y ella deja una chaqueta olvidada en mi casa para volver a vernos, ahí surge una relación un poquito más intensa, pero que no pasa de ser meramente circunstancial, nada parecido a una relación sentimental. Ni siquiera mantuvimos relaciones”, agregó.

“Yo empecé a ignorarla, no quería nada saber nada de todo eso, y ella llegó a presentarse en la puerta de mi casa, a escribir a mis amigos a través de Instagram y a tener comportamientos de este tipo. […] Un día concreto se presentó en mi casa con comida asegurándome que yo lo que necesitaba es que me cuidaran y que ella estaba ahí para eso”, dijo, apuntando también que ella nunca le había comentado que ejerciese la prostitución. “Yo no supe que era escort hasta ese día”.

La noche de la denuncia

Según Conde-Pumpido, la noche de la supuesta agresión fue esto lo que ocurrió: “Ese día había dos amigos en mi casa, uno de ellos se fue sin que ni ella lo viese, ella pretendía que nadie pudiera testificar en su contra diciendo que eso no había pasado, y la forma de hacerla era acusarlos a ellos también de participar en el supuesto acto”.

“Cuando ya me cansé de escucharla, le pedí, por favor, que se fuese de mi casa y entonces ella se hizo la ofendida, le pedí a un amigo mío que estaba en la casa que la llevase y eso ella se lo tomó muy mal, decía que tenía que ser yo el que le llevase. Ella empezó a pegar gritos y a aporrear la puerta, yo no le abrí y ella llamó a la policía, lo que les contó es una historia completamente diferente de lo que luego se dijo en la denuncia”, apuntó.