TELEVISIÓN
Belén Rueda confiesa en ‘El Hormiguero’ que sufrió un ictus
La popular actriz ha revelado en el programa de Antena 3 uno de los episodios más desconocidos de su vida: “El cuerpo me dio un aviso, uno muy serio”.
‘El Hormiguero’ ha cerrado su semana con la visita de una gran amiga de Pablo Motos: Belén Rueda. La popular actriz es toda una asídua en el plató de Antena 3, aunque hasta esta ocasión, no había revelado uno de los episodios más difíciles de su vida. Y es que la madrileña, de 58 años, ha sorprendido a todos confesando que sufrió un ictus en 2019. “No lo había contado antes”, comienza diciendo.
“Hubo una época en la que estabas durmiendo unas tres o cuatro horas al día, no más. Hasta que el cuerpo te dio un aviso. Uno muy serio. Creo que fue un ictus transitorio”, da a conocer Pablo Motos antes de que Belén Rueda diera más detalles al respecto. “Pensé que era una lipotimia”, cuenta ella. La actriz comenzó a marearse hasta perder la conciencia durante “un tiempo muy cortito”. “Llamé a mi hermana para que viniera, que vivía al lado, y está acostumbrada a verme. Fue ella la que decidió que iba a llamar a una ambulancia”, añade.
“Hay tres cosas que te pueden salvar la vida: sonreír, llenar los carrillos al aire y cerrar los ojos e intentar tocarte la nariz. Depende de la zona de la cara que te tocas, es que está afectando a una parte del cerebro u otra”, explica la protagonista de ‘La Emita’, su nuevo reto profesional. Una cinta que llegará a nuestros cines el próximo 17 de noviembre.
El diagnóstico de Belén Rueda
Si bien Belén Rueda creyó que se trataba de una lipotimia, nada más lejos de la realidad. Los médicos confirmaron que la actriz había padecido un ictus transitorio. “Me dijeron que era estrés por lo cual no era bueno el ritmo que estaba llevando. Se dieron cuenta que tengo una aneurisma”, cuenta ella. “Cuando pasan este tipo de cosas parece que estás peor, pero lo cierto es que no es así. Mi neurólogo me dijo que ahora estaba mejor que antes y es verdad. Lo cierto es que hay un tiempo en el que cualquier molestia o dolor lo achacas a eso. Tiendes a pensar en lo peor”, afirma.
Este gran susto provocó que Belén Rueda se tomara la vida de una manera mucho más tranquila al cambiar sus hábitos diarios, aunque sin dejar de lado su gran pasión: la interpretación. “Un mes después estaba rodando con Daniel Calparsoro”, concluye.