Alves: Joana Sanz olvida sus penas de fiesta
La modelo y todavía esposa del futbolista ha pasado la noche bailando y divirtiéndose en la inauguración de una clínica de Sesderma en Emiratos.
Joana Sanz está intentando olvidarse de sus problemas y adversidades volcándose en el trabajo y, por qué no, también divirtiéndose en él, después de que su esposo, Dani Alves, ingresase en prisión provisional a la espera del juicio por la denuncia que pesa sobre él de una joven de 23 años que dice que el brasileño la agredió sexualmente la noche del pasado 30 de diciembre en el baño del reservado de la discoteca Sutton de Barcelona.
La modelo, quien está pasando una época muy complicada a nivel emocional por la situación de su todavía marido y tras el fallecimiento de su madre a mediados de enero, ha visto en su profesión una verdadera tabla de salvación para este difícil periodo que le está tocando atravesar.
Así, tras anunciar que se iba a pasar unos días a Emiratos, ayer se la pudo ver en una fiesta en la que amadrinaba la apertura de una clínica de belleza de Sesderma en el Dubai Mall.
Bailando y sonriendo
Joana aprovechó la fiesta para entregarse a los bailes y disfrutar de la fiesta de inauguración de la marca española en el exclusivo Sushi 99, a la que también acudieron las sopranos Virginia Tola y Estíbaliz Martyn.
Con un vestido largo de lentejuelas que la hacía brillar más si cabe, la modelo disfrutó al ritmo de Chris MJ y los Gipsy Kings, entre otros, junto con más de un centenar de otros invitados.