Sara Sorribes y el “ejemplo total” de Rafa Nadal
La castellonense, que estuvo seis meses sin jugar por una lesión, se fija en el tenista balear, al que añora en París. Este jueves juega contra Martic.
Sara Sorribes vuelve a disfrutar en las pistas de tenis después de sufrir una lesión en el escafoides del pie derecho, que le tuvo de baja durante “seis meses clavados”, como ella misma cuenta, entre el torneo de Parma, en octubre del año pasado, y el de Bogotá, en abril del presente. “Volver aquí, a jugar un Gran Slam es superbonito y superilusionante. El año pasado vine cinco horas a borrarme, porque me rompí una costilla en Roma”, recuerda la castellonense de 26 y 132ª del mundo, que juega con ranking protegido.
“Para mí lo más duro fue aceptar que iba a ser el tiempo que fue. Porque yo tiendo a pensar que me voy a recuperar de todo rápido, que si hago caso se va a curar todo más pronto y en este caso no era así”, explica Sara, que llegó a pensar en tirar la toalla.
“Fue muy difícil, porque empecé a perder la ilusión, la motivación, las ganas. Entonces pensaba, ostras, si no me apetece ver tenis, ni hacer nada ni entrenar, igual significa que no me va a apetecer volver”. El problema para ella es que al principio no le dejaban “hacer nada”. “Yo quería ir al gimnasio a hacer abdominales, pesas, cualquier cosa... Luchaba contra mi cuerpo hasta que lo acepté”.
Añoranza
La figura de Rafa Nadal, que ha vuelto muchas veces después de lesionarse, ayudó a Sorribes. “Creo que es el ejemplo total”. “Para mí era un ritual venir a este torneo y ver entrenarse a Rafa. O sentarme en la pista central y pensar, vale, OK, la gente se va a dormir la siesta y yo vengo a ver a este hombre entrenando. Se lo decía a Silvia (Soler, su entrenadora) Yo creo que todo el mundo le echa de menos”, piensa la española, que este jueves (11:00, Eurosport) se enfrenta a la croata Martic tras ganar el martes a la francesa Burel. A la misma hora, juega otra tenista de la Armada, Bolsova, contra la eslovaca Anna Karolina Schmiedlova.