Djokovic regaña a Roland Garros: “Mi lesión podría haberse evitado”

Emocionado, con la adrenalina disparada después de remontar en cinco sets y más de cuatro horas al argentino Francisco Cerúndolo en los octavos de final de Roland Garros, Novak Djokovic le dedicó unas palabras en francés a los espectadores de la Philippe Chatrier.

“Gracias a todos, como en el último partido, esta victoria es vuestra. En el anterior encuentro estaba 1-2 ante Musetti, y en el cuarto set recibí una energía de la gente que me cambió. Y hoy igual, qué puedo decir, he estado a unos puntos de perder el partido”, dijo el serbio en el micrófono que le ofreció un atónito Mats Wilander.

“Quiero dar la enhorabuena a Francisco por el encuentro que ha hecho, bravo, se merece un aplauso”, continuó, con elegancia, Djokovic. “No sé muy bien qué ha pasado, la única explicación que le encuentro para haber ganado es por vosotros”, reiteró el balcánico, que no quiso reprocharle nada al torneo en la pista.

Lo hizo más tarde en la rueda de prensa: “Mi lesión podía haberse evitado”. Así de contundente fue al valorar los motivos del resbalón que provocó que las molestias que reveló que arrastra en la rodilla derecha “desde hace un par de semanas” se activarán, cuando en realidad no tenía una lesión que le preocupara “en absoluto”. “No había tenido problemas en otros torneos, hasta hoy. Acabar tan tarde el anterior partido (contra Musetti) no me ayudó a dormir, para los bioritmos, la recuperación… Pero en realidad entré al partido encontrándome muy bien. Pero en el tercer juego del segundo set, me resbalé, una de las muchas veces que me pasó hoy. Y eso afectó a mi rodilla”, comentó.

Dolor y dudas

“Empecé a sentir dolor y llamé al fisio. Me dieron medicación, pero eso interrumpió mi juego, durante dos sets y medio. No quería intercambios largos y sufría con las dejadas y cambios de dirección de Francisco. Después del tercero pedí más medicación y en el cuarto las cosas empezaron a ir mejor. Afortunadamente, en el quinto jugué prácticamente sin dolor y menos limitaciones en mi movimiento”, añadió, antes de sembrar dudas sobre su futuro en el torneo. “El efecto de la medicación no durará mucho, y aunque los médicos me han dado buenas noticias, hay que esperar. “Mi equipo ha hablado con la gente de Roland Garros para preguntar por qué era tan difícil solucionar lo que pasaba en la pista. Había zonas en las que ya no quedaba arcilla, solo cemento, quizá por el cambio de condiciones, el sol y el calor, parecía como que se hubiera retirado algo de tierra. Yo me he caído muchas veces en mi carrera, pero no me he resbalado tantas en un mismo partido, como n esta ocasión. La lesión ha pasado exactamente por eso. Nos ayudaría que trajeran algo más de arcilla en cada partido”, explicó el balcánico, que se hará pruebas este martes para determinar el estado de su dolencia.

“No sé que pasará mañana o pasado, si podré salir a la pista y jugar (el próximo partido). Espero que sí”, advirtió. “He sobrevivido, he ganado el partido, bien. ¿Pero podré jugar el siguiente? No lo sé. No sé la gravedad de la lesión. ¿Pero se podría haber evitado?. Posiblemente sí, si se hubiera cuidado un poco más la pista durante el encuentro”. El desenlace de esta historia se conocerás el martes o el miércoles.

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