Alcaraz, Medvedev y Djokovic: el número uno se juega en París

Carlos Alcaraz ya está en París. El jugador español viajó ayer a la capital francesa, en la que lucirá como primer cabeza de serie. Hoy, desde las 14:00, Roland Garros realizará el sorteo de su cuadro principal y Carlitos, que este lunes inició su 23ª semana como líder del ranking mundial, partirá desde lo más alto. Después de revalidar título en Madrid, sólo necesitaba hacer acto de presencia en Roma para arrebatarle el trono a Novak Djokovic. “Es increíble ser numero uno en Roland Garros y no me lo hubiera creído si me lo dices hace unos años. No cambia mucho para mí, solo me concentro en el torneo, en los partidos y en el juego. Es algo en lo que intento no pensar demasiado, aunque es algo increíble”, celebraba Charly después de vencer a Albert Ramos en su primer partido en el Masters 1.000 italiano. En tercera ronda, se vería sorprendido por el desconocido Fabian Marozsan, pero el trabajo estaba hecho.

En el Open de Australia de 2022, Alcaraz se estrenaba como cabeza de serie en un Grand Slam, siendo el 31º favorito al título. Un año y cuatro meses después, disputará su primer grande como favorito entre los favoritos, siendo poseedor de un número uno que deberá defender, principalmente, ante Danill Medvedev (2º actualmente) y el propio Djokovic (3º). De forma remota, Stefanos Tsitsipas (5º) también tiene opciones de salir de París como líder del ranking. Casper Ruud, pese a ser 4º en la clasificación, está descartado de la lucha. El noruego, que perdió en la final del año pasado ante Rafa Nadal, rey ausente en esta edición, defiende 1.200 puntos. Medvedev, que no le ha encontrado el gusto a la tierra hasta su título en Roma, sólo defiende 180 créditos. Alcaraz y Djokovic, por su parte, 360.

Así las cosas, el jugador español iniciará Roland Garros con 6.455 puntos, 305 por encima de Medvedev y a 860 de Djokovic. Una renta exigua si se tiene en cuenta que, como Grand Slam, el torneo premia con 2.000 créditos, pero suficiente para que Alcaraz dependa de sí mismo en el objetivo de retener su corona. En el peor de los casos, a Charly le valdría con alcanzar los octavos de final para salir de París como número uno. Para que fuera válido dicho supuesto, Medvedev no debería alcanzar las semifinales y Djokovic no podría ser uno de los finalistas. En hipótesis más favorables, Alcaraz seguiría en los más alto de la clasificación ATP siendo campeón, en todos los casos, o finalista siempre que no perdiera contra Medvedev en el partido por el título. Llegando a semifinales, el uno seguiría en manos de Alcaraz si Medvedev no llega a la final y Djokovic no es campeón; alcanzando los cuartos, sólo podrían robarle la corona unas semifinales del ruso o el título del serbio.

Las amenazas

Viéndolo desde el lado contrario, Medvedev, que también depende de sí mismo, sería número uno ganando el torneo o perdiendo en la final contra alguien que no sea ni Alcaraz ni Djokovic. El ruso también tendría opciones alcanzando las semifinales, siempre que Alcaraz no llegue a cuartos ni Djokovic sea campeón, o llegando a cuartos, con una pronta eliminación de Carlitos (segunda ronda). Djokovic, por su parte, después de cederlo en Roma, sólo podría recuperar el trono alcanzando, como mínimo, la final. En ese supuesto, necesitaría que Alcaraz no llegara a cuartos ni Medvedev, a semifinales. Ganando el título, el serbio sería número uno siempre que el rival por el título no fuera el español. Tsitsipas, finalmente, sólo alcanzaría la cima proclamándose campeón y esperando una mala actuación de Medvedev, Djokovic y Alcaraz. El uno se juega en París y el español tiene los números de su lado.