1
2
3
Cristina Bucsa
4
6
6
Belinda Bencic
6
3
2

TENIS | WTA 1.000 CINCINNATI

Bucsa da la campanada: desquicia y gana a Bencic, 14ª del mundo

La española remonta con diez breaks ante la vigente campeona olímpica, que rompió la raqueta y estuvo a punto de llorar. Paolini, próxima rival este miércoles.

Cristina Bucsa devuelve un golpe de Belinda Bencic en el Western & Southern Open de Cincinnati.MATTHEW STOCKMANAFP

“Es una gran jugadora y estoy muy feliz de lo que hice. Di lo mejor en cada punto y creí en mí, esa fue la clave. Pienso que he mejorado mucho en cada partido y en cada entrenamiento”, así, con la sencillez que le caracteriza, resumió Cristina Bucsa la victoria más importante de su carrera. Nunca había ganado a una top-20 y este martes en Cincinnati, en un WTA 1.000, dio la campanada al remontar y vencer por 4-6, 6-3 y 6-2 en 2h29 a Belinda Bencic, suiza de 26 años y 14ª del mundo, vigente campeona olímpica, semifinalista del US Open 2019 y ganadora de siete títulos, dos de ellos este mismo año. “Oh, Dios mío”, dijo Bucsa, que viene de jugar la previa, cuando se enteró de que ese era su mayor triunfo. En segunda ronda, este miércoles (sobre las 23:00), se enfrentará a la italiana Jasmine Paolini.

La cántabra de 25 años y 84ª desquició completamente a Bencic con un planteamiento inteligente, moviendo muy bien la bola con el revés y entrando después con la derecha hasta agotarla. La helvética, al borde de las lágrimas mediado el partido, pese a que había ganado el primero y dominaba por 2-1 en el segundo, tiró la raqueta y después la rompió a golpes contra el suelo después de que Bucsa colocara el 3-0 el marcador de la tercera manga.

Cristina no tuvo opciones al principio del encuentro por culpa del saque, su punto débil, y de los errores no forzados, pero con el paso de los minutos cambió ligeramente el servicio, con más revoluciones y, al tiempo que minimizaba los fallos, dejó de cometer dobles faltas, mientras que Belinda cada vez hacía más (acabó con 14).

Una tenista peculiar

Jugadora atípica, con su equipación multimarca sin patrocinadores, muda en el golpeo, discreta en las celebraciones y muy serena en el momento del error, la tenista nacida en Moldavia y criada en Torrelavega, simpática y humilde, aprovechó el día aciago de Bencic con el servicio para rompérselo diez veces. Ganó más puntos al resto que en sus saques y controló la situación con un aplomo tremendo que descolocó a la helvético, que pasó por un verdadero calvario.

Lo más visto

Más noticias