Quartararo vuelve a pasar por quirófano

A Fabio Quartararo le tocó formar parte de la regla y no ser la excepción. Porque después de dos cirujías anteriores relacionadas con el síndrome compartimental, el francés ha vuelto a pasar por quirófano por tercera vez para tratar esa dolencia en su antebrazo derecho. Tras la operación fue el piloto de Yamaha, en sus redes sociales, quien dio a conocer la noticia tras una intervención exitosa que le realizaron sus médicos de confianzaz en el Hospital CH Aix, en Provence. Este centro es el mismo en el que ya se operó durante la última visita al quirófano que realizó con este mismo motivo y acompañando a la imagen donde el Diablo todavía se mostraba en la cama del hospital, el francés comentaba:“¡Cirugía de brazo hecha! Unos días de descanso y listo para entrenar de nuevo”.

Después de una temporada intensa para Yamaha en general y Quartararo en particular, inmersos en esa búsqueda de soluciones que parecen comenzar a aflorar en la marca japonesa, el francés ha aprovechado el inicio de las vacaciones para solucionar esos problemas en el brazo que han sido recurrentes a lo largo del curso. Y con esta última intervención, Fabio espera que vaya la vencida. Porque el síndrome compartimental le acompaña en su brazo derecho desde ese 2019 en el que hizo su debut en MotoGP con la M1 en el garaje de Petronas. El Diablo acusó una de las molestias que más arrastran los recién llegados a la máxima categoría y entonces, tras el GP de Italia, se sometió a su primera operación en el Hospital Universitari Dexeus-Grupo Quirónsalud de Barcelona.

Una vez llegó al garaje oficial de Yamaha, Quartararo volvió a vivir los mismos problemas de sídrome compartimental durante el inicio de la temporada y a diez días de su gran premio de casa, el francés decidió pasar de nuevo por quirófano para solventar el contratiempo. Entonces, la cirujía ya tuvo lugar el Hospital CH Aix en Provence donde ha vuelto a ser intervenido. Con la diferencia de que ahora, Fabio tendrá todo el invierno por delante para culminar su recuperación. Los próximos test que prepara MotoGP están programados para el mes de febrero en Sepang y hasta entonces, la marca de los diapasones trabajará exclusivamente con su equipo de pruebas encabezado por Andrea Dovizioso.

El piloto italiano será el encargado de poner a prueba, por primera vez, el nuevo motor V4 que han desarrollado desde la casa de Iwata. La llegada de Luca Marmorini, ingeniero de motores y ex de Ferrari en la F1, tendrá su primer efecto directo de cara a una temporada esperanzadora para Quartararo, especialmente después del primer test de la pretemporada. A la espera de probar el nuevo propulsor, el francés se marchó de Montmeló “con buenas sensaciones” y aunque admite que todavía están “muy lejos” de las primeras posiciones, al menos, empieza “a disfrutar de verdad”: “Ahora realmente puedo ir al límite. Pero tenemos un objetivo claro y es volver. Y todo lo que podamos hacer para volver lo antes posible, lo haremos”. También a nivel físico, como ha demostrado.