Álex será más Márquez con la Ducati
El bicampeón está radiante en la escudería Gresini. De Marc dice que “va a ser el favorito para este año”, pero no le tiene miedo: “No me siento mejor ni peor que él ahora”.
El equipo Gresini de MotoGP experimenta este año un cambio importante en el box con la salida de Enea Bastianini en dirección a la escuadra oficial Ducati y la llegada como recambio de La Bestia de Álex Márquez, al que se ve entusiasmado por dejar atrás una Honda que le acabó amargando la vida el año pasado y enamorado desde el primer instante de la Ducati.
“Estoy en un equipo con mucha historia y grandes recuerdos en el campeonato, y en una gran familia. Estoy con muchas ganas de ir al test de Malasia y probar la nueva moto. En Valencia ya pude rodar un día con la Ducati y, aunque es difícil sacar conclusiones en tan poco tiempo, se ve que el potencial está ahí. Las sensaciones fueron muy buenas. Sé que durante la temporada puede haber altibajos, momentos mejores y peores, pero trabajando juntos, en equipo, saldremos adelante”, empezó diciendo el bicampeón en la presentación de un equipo que también tiene presencia en las parrillas de Moto2, con Jeremy Alcoba y Filip Salac, y de MotoE, con Matteo Ferrari y Alessio Finello.
Llegado el turno de las preguntas de los periodistas, el que más acaparó fue Álex y no podían faltar las referencias a su hermano, Marc, aún enrolado en el Repsol Honda. Al preguntarle si este invierno ha sido diferente sus modos de entrenar por ser ya pilotos de fábricas diferentes, el ilerdense deja claro que eso no ha cambiado: “El entrenamiento ha sido como cada año. Yo personalizo mi preparación en las cosas que necesito y, tras probar la Ducati en Valencia, entendí algunas cosas que debía hacer. Tanto él como yo sabemos diferenciar y somos profesionales. Siempre disfrutamos entrenando juntos y Marc siempre va rápido en todo lo que hacemos, lo que es bueno para mi entrenamiento. Somos pilotos con motos diferentes, pero también somos hermanos y sabemos diferenciar”.
Y por rematar con Marc, al preguntarla a Álex si este año se siente por vez primera más fuerte que el mayor, por disponer de la aplaudida Ducati, dice: “No. Cuando empiezas una temporada estás en igualdad de condiciones con todos, da igual el nombre, da igual la moto. Todos empezamos de cero. Es verdad que Ducati viene de un gran año, y Honda de uno muy difícil. Tuvieron muchos problemas el año pasado, y yo los sufrí. Pero como he dicho, ahora empezamos todos con cero puntos. Marc ya sabemos que es el mejor piloto de la parrilla, es así, y es el que más títulos tiene en el bolsillo. Así que, por supuesto, va a ser el favorito para este año. Le he visto entrenando mucho y no me siento mejor ni peor que él ahora. Empezamos igualados y ya se verá en la primera carrera. Ahora me siento muy bien conmigo mismo, tengo que mejorar algunas cosas, aprender también cosas de él, porque es mi hermano y entreno siempre con él. Tenemos que trabajar, empezamos desde cero y espero que sea un gran año para mí”.
En cuanto a cómo fue la primera impresión al manillar de la Ducati, en el test de Valencia del pasado mes de noviembre, recuerda: “La posición y la ergonomía de la Ducati es muy diferente a lo que estaba acostumbrado, muy diferente respecto a la Honda, pero me sentí cómodo con ella desde el principio. Sentí que tenía un motor fácil y me gustó su manera de entregar la potencia. Está claro que mi estilo tiene que cambiar algo y eso es lógico. Tengo que copiar algunas cosas de los otros pilotos Ducati, pilotos que llevan más tiempo con esta moto. Espero llegar en forma y adaptado a la primera carrera del año, en Portimao”.
Pregunta interesante fue la de si, viendo cómo han ido las cosas últimamente en MotoGP, es una ventaja para un piloto disponer de una moto europea en lugar de una japonesa. Ojo a lo claro que lo tiene: “Parece que las fábricas europeas tienen ventaja en estos momentos, pero no es porque sean europeas sino por su mentalidad y rapidez a la hora de trabajar y hacer cambios. Yo estoy ahora con Ducati y sé que estoy en una gran sitio. Cada el piloto marca menos la diferencia en MotoGP, y es una ventaja para los pilotos correr con una fábrica europea”.
Y sobre cómo ha sido este invierno, si diferente a los últimos, porque se le veía estresado el año pasado, sintiéndose solo y sin contar con la fábrica, ahora como piloto Ducati dice. “Ha sido un invierno bastante normal, aunque es verdad que me tuve que tomar un descanso después de Valencia porque estaba un poco en el límite en la parte mental, pensando en motos y estas cosas. Durante la temporada me sentí bastante en el límite con toda la situación que tenía. Muchas veces comenté que me sentía un poco solo en el box, pero es algo del pasado. Sufrí, pero aprendí mucho de esa situación. No ha sido fácil para nadie, sufriendo con la moto, pero no puedo quejarme nada del equipo LCR. Estuvieron detrás de mí todo el rato, tenía un equipo muy bueno allí, y como pudisteis ver en Valencia, fue muy emocionante el momento de dejar el equipo. Mi decisión estaba tomada y era algo que necesitaba. Esta es una gran oportunidad para mí, sentí que me recibían muy bien cuando me estrené en Valencia. En diciembre estuve en la fábrica, en Ducati. Las sensaciones son muy buenas, la motivación es alta, como siempre. Porque el año pasado estuve en una situación complicada pero nunca perdí la motivación, para seguir apretando. Por supuesto, la pretemporada es larga, habrá altos y bajos, buenos y malos momentos. Pero tenemos que estar siempre unidos y trabajando para intentar hacer una gran temporada”.