Palou: “El objetivo es el mismo: el campeonato y las 500″

Álex Palou Montalbo (San Antonio Vilamajor, Barcelona, 1997) está a punto de comenzar la temporada 2024 de la IndyCar (domingo GP de St. Petersburg, 18:00), de la que es bicampeón (2021 y 2023). Afronta su quinto año en el campeonato norteamericano, el cuarto enrolado en la estructura Chip Ganassi, uno de los equipos de referencia y con los que además estará en las 24 Horas de Le Mans con el Cadillac V-Series R. Su debut en la prueba francesa, una de las más grandes del automovilismo mundial, no le quita el foco y apunta alto: defender el título y esas 500 Millas que se le resisten. Y avisa en AS de que a La Sarthe no va de paseo.

-La temporada de la IndyCar está a punto de comenzar. ¿Llega preparado para defender su campeonato? ¿Cómo ha trabajado en post-temporada?

-La verdad que ha sido movido, con el nacimiento de la niña. Ha sido un invierno más de trabajar que de descansar, pero la verdad es que estoy muy feliz. Hicimos bastantes test en Estados Unidos entre diciembre y enero y estamos contentos de cómo ha ido esta breve postemporada.

-Iba a preguntarle un poco más adelante por ello, por su paternidad. Siempre se dice que los pilotos cuando son padres por primera vez pierden una o dos décimas. ¿Lo ha notado?

-No, para nada. Yo de hecho diría que es hasta al revés. Y más basándome en mi compañero Scott (Dixon) que tiene 3 hijos y no suelta rienda, así que no. Desde que soy padre hicimos una carrera en Daytona (24 horas), también un par de test en IndyCar y puedo decir que eso no es verdad.

-En cualquier caso va a tener un año sin descanso. Esta temporada se embarca en el proyecto de las 24 Horas de Mans con Cadillac. ¿Le puede quitar eso un poco el foco a la Indy o no le influirá?

-No me quitará foco. Obviamente, es una cosa a la que le doy muchísima importancia y a la que le voy a poner mucho esfuerzo, tiempo y muchas ganas. Pero al final tanto el equipo como yo sabemos cuál es mi objetivo número uno y mi trabajo principal, que es el campeonato de la IndyCar y las 500 Millas de Indianápolis. Durante esa semana que va a ser Le Mans sí va a ser solo centrado en Le Mans. Va a ser mi primera vez y es una oportunidad única de estar en un equipo grande, en la categoría más grande e intentar ganar. Desde mi punto de vista ganar en Le Mans en cualquier categoría es igual de importante, pero mola más si puedes ganar la categoría más grande.

-Además, en ambos proyectos tendrá coches y equipos competitivos. En la Indy con Ganassi, escuadra dominadora tanto a nivel de pilotos como de estrategia desde el muro y en Le Mans asociados con Cadillac, que el año pasado hizo podio en La Sarthe y un cuarto puesto. ¿Optimismo?

-Sí, mucho. En la IndyCar sabemos lo que tenemos y que tengo un muy buen equipo ganador alrededor. No ha cambiado nada en mi coche, en mi equipo del número 10. Las piezas claves son las mismas. Va a ser igual de duro, igual de reñido. Y luego en Le Mans el año pasado tenían un buen coche. El único hándicap es que nunca he estado en Le Mans y que además con el calendario de Indy voy a perderme la semana de entrenamiento. Pero es un objetivo que tenemos ahí, que vamos a disfrutarlo.

-La temporada de la Indy va a ser un poco atípica por el cambio de motorización, por el paso a mitad de año a los propulsores híbridos que ya ha tenido posibilidad de probar. ¿Hay muchas diferencias entre los dos tipos de motores y qué opina de que se cambien, por así decirlo, las reglas del juego a mitad de campeonato?

-Obviamente es atípico no solo el que hagamos un cambio, sino que además lo hagamos en mitad de la temporada. No es lo ideal. Pero sí que han tomado esa decisión porque era lo mejor para poder tener los 28 coches con las piezas que hacen falta y también los repuestos. No es lo mismo tener 28 coches y ningún repuesto que tener todos los repuestos para que todos los coches al final puedan estar en pista, pase lo que pase. Va a ser un hándicap para todos, pero no va a ser superdifícil porque al final no cambia todo. Solo cambia la parte trasera aun siendo un cambio muy grande. Lo bueno es que hemos estado haciendo bastantes entrenamientos, bastantes kilómetros con el sistema y ha evolucionado mucho. Ahora es mucho mejor, está mucho mejor integrado, ya están todas las reglas puestas. Es divertido porque no hay nada automático, es todo manual. Cuando tenemos que regenerar, lo regeneramos manualmente. Cuando hay que usar esa energía, lo tenemos que hacer nosotros manualmente, así que nos han añadido herramientas. Va a añadir más cosas a las estrategias de carrera.

-Entonces se va a mantener la esencia del campeonato, tan marcado por la igualdad…

-Sí. Estará todo muy igualado. De hecho, en el test de Sebring en el día que estuve yo, en una décima había 6 pilotos, así que será divertido.

-¿Una de las claves para destacar entre tanta igualdad es la regularidad como la de la temporada pasada en la que su peor resultado fue un octavo y logró cinco victorias y otros cinco podios?

-Yo creo que es un mix, de regularidad y victorias. Que tu peor resultado sea un octavo hace que tu media sea una pasada, pero si le sumas tener el máximo número de victorias del año, pues obviamente también suma un montón. El año pasado fue especial, fue mágico y va a ser difícil de repetir, pero no imposible. Vamos a intentarlo. La gracia de IndyCar es que tienes que ser muy regular porque hay 18 carreras y al mismo tiempo una victoria cambia mucho, porque ganas muchos puntos.

- Y luego está una carrera como las 500 Millas de Indianápolis, donde además entra en liza la fortuna. Todo lo que consigue en la IndyCar se le resiste en las 500. ¿Siente que no le acompaña la suerte en esa carrera?

-Hemos estado ahí dándole a la puerta a ver si se abre y no, no se quiere abrir, la verdad. Hemos estado luchando, hemos estado liderando bastante en los últimos tres años, hemos hecho la pole... La temporada pasada si no hubiera sido por el toque (en boxes, con VeeKay) creo que habríamos estado más adelante. Y aun así, terminamos cuartos. Fue una buena remontada. Pero hay que tener en cuenta que solo he corrido cuatro ediciones y hay pilotos como Newgarden que ha ganado su primera después de 11 años intentándolo. O mi compañero Dixon, que después de 24 ediciones solo ha ganado una, pero ha ganado 6 campeonatos. En las 500 nunca te tienes que dar por vencido, puede pasar de todo y tienes que estar siempre ahí porque algún día esa puerta se abrirá. Es uno de los grandes objetivos de este año, pero no nos volveremos locos. Y más con los factores que juegan durante ese día.

-Lo tuvo tan cerca en 2021..

-Obviamente la de Castroneves es la que más cerca hemos estado, fuimos segundos y a falta de 2 vueltas estaba liderando. Pero a la vez también fue en la que menos preparado estaba: mi primera vez liderando un oval, no sabía cómo defender o cómo atacar. En cambio, en 2022 mes sentí más fuerte y el año pasado, aún más fuerte. El resumen es que en la de 2021 fue en la que estuve más cerca, pero en la que menos preparado estaba para ganarla.

-Si le digo que cuando más preparado se le vio fue el año pasado, ¿está de acuerdo? Y ¿cómo se gestiona una acción como la de VeeKay golpeándole en boxes y arruinando su carrera?

-Estoy de acuerdo en que la del año pasado fue el que más ritmo tenía. Y no solo ritmo. En general, cómo nos podíamos defender y cómo podíamos gestionar la carrera era mucho mejor que otros años. Con más control. Y luego al final son carreras. VeeKay no lo hizo a propósito. Si sabes que alguien lo ha hecho a propósito, a lo mejor sí que quieres bajarte del coche y a lo mejor tener ahí un poquito de UFC como Topuria (risas). No puedes dejar que ese momento te coma. Porque al final pasamos de poder haber tirado la toalla y quedar el 20 y tener solo pocos puntos, a terminar cuartos y sumar 60 puntos que te pueden hacer ganar el campeonato. Creo que nunca debes tirar la toalla en ningún sitio, pero menos en el motor.

-Con esa mentalidad aparece ya en un montón de estadísticas de la Indy al lado de leyendas como, Dixon, Newgarden, Power, Franchitti… O eso muestra la televisión norteamericana en cada retransmisión…

-Hay estadísticas en las que nunca habría pensado estar. Pero me siento muy contento por ello y es increíble, aunque no me centro mucho en eso. Hay mucho por hacer, mucho que podemos mejorar y mucho que podemos seguir sumando y ganando. Así que el objetivo es no parar. Y un día, cuando terminemos, pues mirar atrás y ver cómo están las estadísticas.

-Y si ese día las estadísticas dicen que Álex Palou fue ganador en 2024 de Le Mans y las 500 Milla, sería…

-Eso solo lo ha hecho un piloto, ganar las 500 y Le Mans el mismo año (AJ Foyt, 1967). Sí que ha habido unos cuantos que han ganado las dos durante su carrera deportiva. Es el objetivo. Ojalá tengamos ese esa oportunidad. Yo creo que ganar una de ellas en algún momento de tu carrera deportiva es increíble. Ganar las dos puede ser ya más que un sueño y ganar las dos el mismo año, pues no sé, haces una fiesta cada día, y bailas un poquito la Macarena (risas). No se podría pedir más. Trabajaremos para ello y ojalá lo podamos conseguir, porque creo que tenemos las posibilidades.