Un campeonato que roza lo imposible

El mundial de Fórmula 1 para Charles Leclers está cada vez más lejos desde el Gran Premio de Hungría. El piloto de Ferrari se aferra a la aritmética y la fortuna para seguir creyendo en el Mundial, pero el monegasco está muy acorralado por un Verstappen que tiene el camino muy despejado para alzarse con el bicampeonato. La ventaja de Max Verstappen de 80 puntos son un hueco que nadie ha conseguido reducir en la historia del mundial. A falta de nueve carreras por disputarse, 225 puntos son los que están en juego, más los nueve puntos adicionales por las vueltas rápidas y los diez puntos para el ganador de la carrera sprint de Brasil. Verstappen podría permitirse un triple cero en Spa-Francorchamps, en Zandvoort y en Monza y todavía seguiría en el liderato para Singapur.

El Ferrari es problamente el mejor coche de la parrilla. Su ‘talón de Aquiles’ ha sido la velocidad punta y el ritmo de carrera en algunos circuitos con respecto a Red Bull, pero a una vuelta han sido muy rápidos. Charles Leclerc tuvo un inicio de campeonato fulminante. Dos victorias y un segundo puesto en las tres primeras carreras aprovechando a la par los dos ceros en Bahréin y Australia de Verstappen por problemas de fiabilidad del motor Honda. Leclerc antes de comenzar el GP de Emilia-Romagna superaba a Verstappen en 46 puntos. Nunca volvió a tener una distancia similar. Desde la cuarta carrera en el trazado de Ímola hasta Hungría Vertappen ha ido remontando a Leclerc. El punto de inflexión fue el GP de España tras el primer abandono de Leclerc. Max comenzó a liderar el Mundial por primera vez con seis puntos de ventaja. Desde España, Verstappen ha ido alargando su ventaja carrera tras carrera. Verstappen ha remontado 126 puntos desde Ímola, para ahora liderar el Mundial con 80 puntos con su máximo rival en el parón veraniego. Un dato que manifiesta la caída de Ferrari en ambos campeonatos.

Últimas 8 carreras de Leclerc

Ferrari pese a tener una de las parejas más habilidosas de toda la parrilla, los resultados han lastrado a Sainz y a Leclerc durante gran parte de la temporada. La fiabilidad, las malas decisiones desde el muro en momentos clave y algunos errores puntuales de pilotaje resumen la temporada para los de Maranello. El más damnificado probablemente ha sido Charles Leclerc. En las últimas ocho carreras, en tres de ellas no ha visto la bandera a cuadros (España, Azerbaiyán, Francia). En otras cuatro de las ocho pruebas no tuvo suerte con la estrategia que le marcaron desde el muro, perdiendo muchos puntos para el campeonato. El mayor ejemplo de la mala fortuna para Leclerc fue el GP de Gran Bretaña cuando tenía la carrera bajo control. Un ‘Safety Car’ le dilapidó a un cuarto puesto con los neumáticos duros mientras Sainz, Pérez y Hamilton lo adelantaban con ruedas frescas. De las últimas ocho carreras solo ganó en Austria, aunque el monegasco sufrió con su acelerador para llegar a la línea de meta. Lo peor para el piloto de la costa azul es que de estas últimas ocho carreras, en siete lideraba para ganar la carrera. En todo el año ha conseguido tres triunfos pese a tener siete ‘poles’. Al contrario que Verstappen, que con tres salidas al frente de parrilla, ha conseguido ocho victorias.

Remontadas del pasado

La Fórmula 1 ha vivido remontadas en el campeonato de pilotos a lo largo de su historia. Hay que tener en cuenta que el número de Grandes Premios ha cambiado con el paso de los campeonatos y que desde 2010, la puntuación cambió al formato actual de 25 puntos para el ganador. La mayor remontada de la historia la firmó James Hunt (McLaren) frente a Niki Lauda (Ferrari) en el año 1976, aunque extrapolando los datos de las 16 carreras de ese campeonato a los números actuales. El piloto austríaco sufrió un accidente en el circuito de Nürburgring que a punto estuvo de costarle la vida cuando se le incendiaba su coche con él dentro. Lauda contaba con 35 puntos de ventaja sobre Hunt en ese momento a siete carreras para el final. Basándo esos puntos al formato actual, la distancia sería de 73 puntos a falta de seis carreras. Hunt finalmente se llevó el campeonato por un punto ya que acortó distancia al no correr Lauda en las dos carreras siguientes.

Otros giros clasificatorios menos drásticos los protagonizaron Jody Scheckter o Michael Schumacher en el pasado. En los setenta, el sudafricano Jody Scheckter recuperó 17 puntos (42 puntos extrapolados) a Jacques Laffite para alzarse con el Mundial de 1979. El francés se desinfló y el máximo rival del piloto africano fue Gilles Villeneuve, aunque siempre lo mantuvo a raya. Ya en el nuevo siglo, Michael Schumacher agarró su sexto título mundial en 2003 por dos puntos contra Kimi Raikkonen. El alemán tuvo que remontar una desventaja de 16 puntos (38 puntos bajo el formato de 2010) que el piloto de McLaren alcanzó al finalizar el GP de Brasil. Cinco grandes premios más tarde Schumacher recuperó el liderato y nunca perdió la primera plaza.

Ferrari conoce cómo dar un sorpasso en la clasificación. Leclerc como actual primer candidato al título podría inspirarse en la hazaña de Kimi Raikkonen en el año 2007. El finlandés logró en 2007 el último título mundial por pilotos para los del Cavallino Rampante. La máxima distancia entre Hamilton y Raikkonen alcanzó los 26 puntos en el GP de Estados Unidos a falta de diez fechas en aquel campeonato. Actualizando esos datos al formato de puntuación actual, el trecho entre el británico y el finalandés sería de 56 puntos. Ice Man acabó ganando el campeonato mundial por solo un punto contra Alonso y Hamilton. También, uno de los vuelcos más recientes y dolorosos para el deporte español la vivió Fernando Alonso en sus carnes. Sebastian Vettel consiguió su segundo título mundial tras recuperar 44 puntos a Fernando Alonso en el Campeonato del Mundo de 2012. Vettel se llevó ese Mundial por 3 puntos frente Alonso, tras ganar cuatro de las siete pruebas. Fernando no ganó ninguna de las últimas siete citas.

Leclerc todavía puede creer en la remontada, aunque lo tiene muy en contra. No solo por Vertappen, sino porque Carlos Sainz también está alcanzando su mejor nivel desde las últimas carreras. Mientras la matemáticas no digan lo contrario, no hay que descartar nada porque giros en la Fórmula 1 ya se han visto muchos. Ferrari necesita dar un cambio radical para competir hasta al final y rendir con el honor que merece el equipo de Maranello porque pilotos tienen y de calidad. Las últimas carreras han dejado mucho que desear. De conseguir el Mundial Leclerc, se conseguiría la mayor remontada en la historia de la Fórmula 1.