¡Sainz hace un podio por descalificación de Hamilton!

Bonita carrera estratégica en Austin con regalo de Mercedes, que dejó ir a Verstappen por un error estratégico cuando Hamilton tuvo el coche más rápido sobre el asfalto, y giro de guion inesperado al final: la FIA encontró irregularidades técnicas en el desgaste del fondo plano del coche de Sir Lewis, también de Leclerc, y dos horas después de la carrera se anunciaron las descalificaciones de ambos coches, porque esta clase de incumplimientos no admiten mucho debate ante los comisarios. La plancha no contaba con el milímetro mínimo de grosor tras la carrera. De esta manera, Norris promociona a la segunda posición y Sainz hereda el tercer puesto en el GP de Estados Unidos y conseguir el tercer podio de la temporada para él después de Monza (3º) y Singapur (1º). Buen resultado para distanciarse de su compañero y para aspirar si mantiene la tendencia positiva a la tercera o cuarta plaza en el campeonato de pilotos.

Se puede revisar lo que sí sucedió en el asfalto. Verstappen ganó por delante de Hamilton y esta vez no fue gracias a su talento imponente o el dominio del RB19. Venció por su equipo, con una estrategia de libro tras leer las condiciones de una carrera dura bajo el sol picante de Texas. El asfalto exigía un mínimo de dos paradas, los ingenieros del paddock hablaron incluso de tres, Max adelantó la suya (vuelta 17) pero Mercedes proyectó un solo ‘pit-stop’ con Hamilton que luego debió descartar la marcha, cuando ya habían regalado la posición al neerlandés. También Ferrari eliminó al ‘poleman’ Leclerc con idéntico plan, en este caso llevado hasta las últimas consecuencias. Norris y Sainz apostaron desde el principio por la doble parada.

En el rápido segundo stint, Verstappen adelantó sin aspavientos a un blando Norris y se quedó solo en la cabeza. Para el último cambio de ruedas, Lando llevaría la iniciativa y Hamilton, la ventaja al final: como paró más tarde, tuvo neumáticos medios frente a los duros del resto. En sus últimas vueltas apretó fuerte, adelantó a Norris con una bonita pelea entre compatriotas del Union Jack y fue hasta un segundo más rápido que Mad Max en su persecución imposible por la victoria. Pero las cuentas no salieron porque el error estuvo en la primera operación. Bajo la bandera a cuadros era segundo. Luego llegarían los exámenes de la FIA.

El cuarto de Sainz ya era bueno

Norris completaba el podio, muy justo, y Sainz lograba un meritorio cuarto puesto que ya sabía dulce, aunque el tercero sea mejor. Tuvo mucho ritmo siempre, proyectó varias vueltas rápidas y adelantó a su compañero por orden del equipo en los compases finales. “Luego tendremos que hablarlo”, protestó Leclerc. No había mucho que hablar: Pérez pasaría más tarde al monegasco y no habría margen para tácticas de contención ni pérdidas de tiempo. Serán buenos puntos igualmente porque consolida su quinto en el campeonato y distancia al compañero.

Lástima que la bonita remontada de Alonso se saldase con un cero por daños en el fondo plano. El Aston Martin salió desde el ‘pit-lane’ con la especificación antigua (Stroll montó la nueva para comparar los datos) y Fernando remontó como un poseso. Se quitó de golpe a la mal llamada zona media y se asentó en el top-10 con su primer ‘stint’ alargado. Llegó a rodar noveno real y el octavo no era imposible, sus tiempos por vueltas se asemejaban más bien a los coches de cabeza, pero una avería en el suelo del coche le obligó a abandonar. Para apreciar el buen domingo de la escudería británica, basta con mencionar que Stroll acabó noveno. Lástima que dos pésimos viernes y sábado puedan generar tanto lastre en una F1 tan igualada.