“El fracaso es necesario en la vida”

A sus 42 años, nadie duda que Fernando Alonso está viviendo su segunda juventud por todo lo alto. Se cuestionó su regreso a la Fórmula 1 y tres años después todo un país sueña con la posibilidad de verlo ganar con un proyecto tan joven como el de Aston Martin. Y es que el español sigue desafiando a todo aquel que se lo ponga por delante. La edad solo es un número y el bicampeón lo demuestra cada fin de semana atravesando una de las mejores etapas de su carrera deportiva. O, al menos, la que está consiguiendo disfrutar al máximo desde cualquier ámbito: en el asfalto, dentro del box, con la prensa, en redes sociales y, sobre todo, siendo plenamente consciente del amor de la afición. “Veía las carreras por televisión y aprecié mucho más las cosas que como piloto no apreciaba antes, como el himno nacional, la vuelta con los pilotos, tener más acceso con los medios, con las cámaras... Son cosas que cuando eres piloto odias, pero cuando estaba en mi comedor lo eché de menos”, admite en el podcast High Performance.

“La Fórmula 1 tiene ese atractivo”, asume el asturiano, que también reconoce que el Gran Circo es “mucho más egoísta, mucho más glamurosa, pero también más falsa” que otras competiciones de las que también ha formado parte, como Le Mans, la Indy o el Dakar. “Es automovilismo más puro”, revela. Pero hay algo único que marca la diferencia en la F1: “El amor de la gente”. “Cuando paré en 2018 estaba cansado de viajar, de todas las cosas alrededor de la Fórmula 1 y de no poder competir por cosas importantes”, explica Alonso que se sorprendió por el cariño de la gente en una época donde se consideraba “prácticamente anónimo” por el bajo interés que tenía el Mundial cuando se fue. “Nadie nos veía, el deporte no era tan bueno como es ahora con ‘Drive to Survive’ (la serie de Netflix sobre la F1) y esas cosas, por eso me sorprendió todo el amor que recibía”, dice Fernando. “Lo único que recibía cuando me encontraba con gente, con aficionados en los hoteles o aeropuertos era: ‘tienes que volver, tienes que volver’”. Dos años después, se confirmó ese regreso.

Y ahora Alonso sueña con todo y hace soñar a todos. Su llegada a Aston Martin parecía precipitada, pero con seis podios en lo que va de curso, la 33 está más presente que nunca. Está tardando en llegar, pero muchos son los que fantasean con una tercera corona del asturiano. Sin embargo, aunque no descarta la opción de que pueda suceder, Alonso asume que sus ambiciones deportivas van más allá de esa nueva corona. Tiene grandes retos pendientes por cumplir y, aunque le “encantaría volver a ganar el Mundial”, reconoce que “no es la mayor prioridad”.

El Dakar, “al 99%”

Y entre esos grandes retos por los que luchar, el asfalto se cambia por arena y el paddock por el vivac. “Voy a intentar el Dakar nuevamente, al 99%, pero eso no significa que el tercer título sea menos prioritario. Es prioritario, pero ganar el Dakar es una gran prioridad para mí también. Quizás tengo que participar ocho años diez años o los que sea hasta que tenga suerte y pueda pelear por la victoria”, admite Alonso, que ya participó en la edición del 2020 del Rally Dakar con Toyota. Y es que una victoria en el desierto es uno de sus sueños pendientes por cumplir: “Si gano en resistencia, en Fórmula 1 y en el Dakar eso sería algo muy especial para mí como piloto y como persona. Eso es lo que está en mi mente en este momento”.

Aunque, para alcanzar la gloria, los momentos difíciles siempre están presentes. En un momento de total sinceridad, el español es claro: “El fracaso es necesario en la vida”. Y la gloria no siempre es una realidad: “En el deporte, en el 90% o 99% de las veces no tendrás éxito. Es bastante fácil si tienes éxito una vez para que valga la pena todas las cosas que has estado intentando durante muchos años. Creo que no ganar y no cumplir con lo que te encantaría es esencial para que cualquier ser humano mejore. Necesitas tener ese nivel de confianza y disciplina para separar lo que es una decepción de lo que puede ser una lección”.

Él mismo conoce mejor que nadie esa sensación. Rememoras esos fracasos y piensas lo que podría haber sido de tomar otras decisiones. Alonso tiene claro qué momento de su carrera cambiaría: “Si tuviera la oportunidad de volver atrás, lo primero que elegiría sería ganar el Mundial con Ferrari. En 2010 y 2012 estuvimos a pocas vueltas de ganar el título, lo que podría haber cambiado las reglas del juego. Sentí una gran pena por haber perdido dos oportunidades tan importantes. Sin embargo, todo esto no es fácil de cambiar porque entran en juego varios factores”. Y cuales otros lamenta: “Es difícil lamentar algo porque está fuera de tu alcance. Lo que sí lamento seguro es no disfrutar más de mi tiempo, de mi carrera”.