Alonso huele la sangre

Hasta los mejores fallan. Y no va por Verstappen, sino por Red Bull y Honda: la unidad de potencia abandonó al campeón en plena clasificación y lo condena al 15º puesto en la parrilla de este domingo. Cuando todo parecía escrito, cuando el paseo de Mad Max se daba por garantizado, la falta de fiabilidad le sacudió y abrió la puerta a un fin de semana abierto, bonito, en el que Checo Pérez defiende el pabellón de la escudería energética. Pero Alonso huele la sangre. El asturiano sale segundo, en primera fila. Y el fuerte de Aston Martin es el domingo. Tiene todas las de perder contra el toro rojo, pero qué importa eso ahora. Hay una victoria en juego y meses atrás todos se hubieran reído de quien hiciera semejante predicción. Se acabaron las penurias de la zona media, el poderío del AMR23 es real: la tercera o cuarta juventud de Fernando se contará por trofeos y este domingo se puede llevar uno de Jeddah Corniche.

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La Q3 fue emocionante. Alonso golpeó primero, pero le batieron Pérez, Leclerc y Russell. Ante el segundo intento, repitió Fernando para quedarse a la estela del mexicano. Solo le superaría Charles, pero el Ferrari del monegasco arrastra diez puestos de sanción en la parrilla por cambiar la centralita y saldrá 12º. Más pronto que tarde Leclerc se encontrará en la carrera con un Red Bull desencadenado. Por delante, Pérez salvaba los muebles porque andaba a medio segundo de Verstappen, pero agarró la pole con fuerza como hizo en este mismo escenario, en 2022. Entonces un coche de seguridad desafortunado le birló la oportunidad de luchar por la victoria. Ahora la tiene en sus manos otra vez.

Russell y Sainz completan la segunda fila. Fue un sábado complejo el de Carlos, superando los cortes siempre a última hora y marcando su vuelta buena también con poco margen. No llegó a cuajar un buen primer sector y eso se atragantó durante toda la clasificación. Al final se le escapó Leclerc. Pero los buenos puntos de Ferrari los tiene que sumar Sainz, que correrá mirando hacia adelante (Fernando, Mercedes) pero también con el retrovisor a mano (Stroll, Ocon, Hamilton…). Al menos aquí tienen más ritmo que en Bahréin y la degradación de neumáticos no es dramática.

Remontada obligada para el campeón

Y para Max… vaya papeleta. Es el más rápido de la parrilla con diferencia (medio segundo por vuelta sobre su compañero, para ser exactos), pero este domingo partirá 15º porque su motor Honda se quedó en blanco durante la Q2. Y eso si no tiene que cambiar elementos. El neerlandés se bajó del coche con cinco minutos de sesión por delante y se fue directo al pesaje. En el garaje, su padre puso cara de querer romper alguna cosa. Qué bonita se vuelve esta F1 sin un dominador tan claro. Jeddah Corniche le permitirá remontar y tiene ritmo de sobra, pero en la zona noble del pelotón no vale solo con abrir el DRS. Además la probabilidad de ‘safety car’ es del 100% (ocho en dos carreras). Hay que ser rápido, limpio y avispado. Por lo que pueda pasar.