Prince of Persia: Las Arenas Olvidadas
Prince of Persia: Las Arenas Olvidadas, guía completa - El observatorio
Detén al implacable ejército de Salomón.
El observatorio es un enorme mecanismo de agua que se utiliza para visualizar los astros y predecir el futuro. Es un mecanismo muy complejo por el que deberás saltar para llegar a la sala del trono. Avanza por los chorros y acciona el mecanismo que cuelga del techo para detener el observatorio
Aparece una palanca, cruza los caños para llegar hasta ella. Gírala hasta que el brazo del observatorio rote y quede en frente del mecanismo colgado del techo, dónde estabas antes. Sabrás que lo has hecho bien cuando la plataforma quede plana. Regresa por los chorros y salta al pedestal.
Desde ahí, congela la columna y salta por los caños hasta la cornisa del final. Sigue hacia la derecha y sube por los ladrillos. Corre por la pared y agárrate al mecanismo que hay al otro lado. Con esto subes el brazo del observatorio y aparecen dos palancas.
Una mueve el brazo pequeña y la otra los dos. Primero mueve la plataforma grande hasta que quede en frente del mecanismo colgado del techo. Después mueve la pequeña para ponerla a continuación de la grande. Salta hasta la plataforma del centro y gira la palanca. Sigue el camino y encontrarás un nuevo mecanismo colgado del techo.
Aparecen dos nuevas palancas. Gira la de la derecha para poner la plataforma ante ti, y luego gira la de la izquierda para poner las pequeñas a continuación. Tras esto, el observatorio se pone en funcionamiento otra vez. Salta por las plataformas para llegar al otro lado. Puedes detener el tiempo para evitar que se muevan.
Una vez fuera, sube a la cornisa y desciende por el tapiz. Avanza por la pared y entra de nuevo en palacio. Dentro hay unos regueros intermitentes. Calcula tus movimientos para congelarlos cuándo estén gruesos y poder agarrarte a ellos. Baja por el tapiz y prepárate para el combate.
Abajo te espera una bestia con armadura. Los ataques normales no le harán ni cosquillas. Carga tus golpes para hacerle daño. Sus ataques son los mismos de siempre, el golpe sísmico y la embestida. Ocúpate primero de los guerreros que hay en la sala y luego céntrate en la bestia. Por la zona hay varias vasijas que puedes romper para recuperarte.
Tras derrotarlo, se derrumba abriendo una nueva ruta. Sube por la pared y cruza el pasillo de trampas. Al final te espera el salón del trono.