TENIS DE MESA | MUNDIALES PARALÍMPICOS

Sastre y Toledo, vidas paralelas hacia una plata para la historia

El bilbaíno y el madrileño, en los Andalucía 2022 PTT World Championships 2022, consiguen el puesto más alto del tenis de mesa español en unos Mundiales.

Comité Paralímpico Español

La historia de Iker Sastre y Miguel Ángel Toledo tiene ciertos paralelismos. En lo bueno y en lo malo. Puede que, por ello mismo, se entiendan tan bien cuando compiten el uno junto al otro. En los Mundiales de 2017, donde terminaron quintos, fueron capaces de superar a Fabien Lamirault y Stéphane Molliens, campeones paralímpicos tanto en los Juegos de Río como en los de Tokio, donde los españoles, precisamente, lograron un diploma, cayendo en cuartos de final. Este martes, en los Andalucía 2022 PTT World Championships 2022, han subido al segundo escalón de un podio histórico, firmando la primera plata mundial de dobles del tenis de mesa español.

Tras superar por 3-0, en cuartos, a los argentinos Fernando Eberhardt y Guillermo Bustamante y por 3-1, en semifinales, a los polacos Rafal Czuper y Tomasz Jakimczuk, madrileño y bilbaíno llegaban a la lucha por el oro con la confianza que otorga el hecho de haber roto un techo, una barrera que nunca se había superado. Territorio desconocido, pese a que se orientaron en él como si fuera un lugar cotidiano. “Si jugamos como lo estamos haciendo, hay posibilidades de que el oro sea para España”, aseguraba Sastre, muy seguro, antes de enfrentarse a la misma pareja que les apeó en Tokio. Podía estarlo. Se siguió al mismo nivel, hasta se llegó a dominar en el marcador, pero los coreanos Park Jin Cheol y Cha Son Yong volvieron a vencer (11-6, 10-12, 9-11, 11-5 y 11-7). A la tercera, buscarán cumplir con el refrán. De momento, son subcampeones de oro.

Orgullo. Superación. Ambición. Reinvención. Todo ha estado presente en unos Mundiales espléndidos de Sastre y Toledo y, también, en sus vidas, que se empezaron a complicar bajo el agua. Con 20 años, una mala zambullida dejó tetrapléjico al madrileño. Se tiró de cabeza y se golpeó fuertemente con el fondo de la piscina. De inmediato, supo que algo no marchaba bien. No podría moverse y, afortunadamente, un amigo se percató. Tras ello, pasó años de búsqueda constante, en los que estudió Trabajo Social y Antropología, trabajó y, finalmente, descubrió el tenis de mesa. Con una pala atada a su mano a través de una venda y aprendiendo a jugar con la izquierda pese a ser diestro (no tiene tríceps en el brazo derecho), dio con lo que buscaba.

Se reencontró y encontró a Iker, con una lesión medular desde los 23 años. El bilbaíno era un chico activo, muy dedicado al deporte (estudió fisioterapia), que estaba practicando surf cuando una ola le golpeó con fuerza, arrastrándolo hasta el fondo del mar. Tras ello, llegó el tenis de mesa. Y multitud de éxitos nacionales e internacionales. En Granada, suma uno más. Uno que no ha llegado solo. Ayer, Jordi Morales y Álvaro Valera ya estrenaron el medallero español en Andalucía, que pudo lucir todavía mejor, pues tuvieron pelota para forzar el quinto y definitivo set (11-8, 11-7, 9-11 y 10-12 ante los británicos Paul Karabardak y Billy Shilton). Ya brilla mucho.

Lo más visto

Más noticias