El carnaval de Efimova… y la impasibilidad de Rylov

“Siempre debería salir con un disfraz, me siento más relajada”, declaraba este fin de semana nada menos que la séxtuple campeona mundial y triple medallista olímpica Yulia Efimova, uno de los iconos de la historia de la braza, quien tuvo la ocurrencia durante la Copa Vladimir Salnikov, que se disputaba en San Petersburgo, de aparecer en la piscina disfrazada. En los 50 metros braza, de flamenco. Y ganó. En los 100 braza, de gladiadora. Y quedó segunda. Habrá que ver si la rusa repite ‘estrategia’ en los Juegos Olímpicos de París, a donde sopesa ir, a diferencia de su compatriota Evgeny Rylov.

“Por supuesto que quiero competir en los Juegos Olímpicos, es el sueño de cualquier deportista. Pero necesitamos estudiar las condiciones. Si resultan inaceptables para mi país, me negaré. Si no, intentaré prepararme y competir”, aseguró Efimova, en declaraciones a la agencia rusa RIA Nóvosti, donde añadió: “Los deportistas rusos ya hemos actuado como neutrales en Juegos Olímpicos, pero si las condiciones de admisión se endurecen, entonces será más importante para mí quedarme en mi país”. Cabe recordar que el Comité Olímpico Internacional (COI) ha abierto la puerta a los deportistas rusos a competir como neutrales, siempre que no hayan ofrecido su apoyo a Rusia en la invasión a Ucrania, entre otros requisitos.

Y eso es lo que incumple claramente Rylov, quien en abril de 2022 ya tuvo que ser suspendido por la FINA (ahora World Aquatics) al aparecer en un mitin de apoyo a su presidente, Vladimir Putin, enfundado además en una chaqueta que portaba en el pecho la ‘Z’ que porta el ejército ruso en su ataque a Ucrania. “No voy a rebajarme al nivel de los provocadores occidentales. Rusia es genial”, declaró el vigente campeón olímpico en 100 y 200 espalda sobre esos requisitos necesarios para nadar en París 2024.

“Estoy a favor del deporte limpio, por lo que no seguiré el ejemplo del COI. He decidido no ir a los Juegos Olímpicos hasta que este disparate se calme. Sigo siendo honesto conmigo mismo, fiel a mi elección y a mi país”, aseguró, siguiendo los pasos de Kliment Kolesnikov.

En cuanto a los disfraces de Efimova, no le fue del todo mal. Tras retirarse el de gladiadora, con un casco enorme, una espada y una capa con los colores del Spartak de Moscú, finalizó segunda en 100 braza. Y el de flamenco le hizo (o no le impidió) ganar la prueba de 50 braza con un tiempo de 29.76. “Creo que desanimé a mis rivales. Primero vi un flamenco, luego me encontré un sombrero en el coche de un amigo y hoy se me ha ocurrido ponerme una chaqueta y una peluca”, explicó la rusa, que a sus 31 años puede estar dejando pasar el tren de sus últimos Juegos.

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