Crawford: “¿Canelo? Yo también soy uno de los grandes del boxeo”

Terence Crawford (41-0-0, 31 KO) está ante el que probablemente sea el reto más grande de su carrera. Después de unificar el peso wélter en un combate con Errol Spence (28-1-0, 22 KO) en el que le pasó por encima y proclamarse campeón del superwélter, dará un salto de dos divisiones para medirse con Canelo Álvarez por su indiscutido del supermedio el 13 de septiembre en el Allegiant Stadium de Las Vegas (Netflix, desde las 01:00). “Los fans se encontrarán con una pelea técnica entre los dos mejores boxeadores de todos los tiempos”, advierte a AS en Riad (Arabia Saudí) en un hotel de lujo. Al igual que el mexicano, ha sido campeón en cuatro divisiones (ligero, superligero, wélter y superwélter).

Subir dos categorías de peso no es fácil, y menos cuando ya has subido una recientemente. Es un salto duro, y más cuando te enfrentas a uno de los mejores boxeadores del mundo. “Lo estoy gestionando muy bien por el momento”, contó el estadounidense en su gira promocional del combate. Canelo ha sido monarca en cuatro divisiones de peso distintas. Es una de las caras del boxeo en la actualidad, y juega con ventaja en cuanto a la experiencia en la división.

“Soy un oponente muy diferente a los que se ha enfrentado últimamente”, aseguró Terence sobre el tipo de duelo que protagonizarán. La fama y trayectoria del mexicano no intimidan al estadounidense. “Yo también soy uno de los mayores nombres del boxeo, así que va a ser un honor para él estar en el ring conmigo también”, afirmó. Ambos son considerados dos de los mejores púgiles libra por libra. Y, obviamente, un triunfo de este calibre le colocaría como el mejor en este ranking.

“Canelo es un gran peleador. Tiene mucha experiencia y no quiero pensar que con un único estilo de boxeo pueda ganarle, porque va a tomar más trabajo que moverse por el ring”, analizó. Para el público, sobre todo por la diferencia de peso, Crawford no es el favorito para llevarse al encuentro, pero esto es algo que motiva al norteamericano. “Me gusta que me pongan como el ‘underdog’. Cuando la gente duda de mí, salgo al ring con mejor ánimo”, aseguró. El pronóstico es claro, una victoria que marcará un antes y un después en su carrera.

Los duros orígenes de Crawford

Crawford lo pasó mal hasta llegar a la cima. Desde pequeño, el estadounidense tuvo problemas de conducta y fue expulsado de cinco escuelas en Omaha, su ciudad natal, por pelear con sus compañeros. Además, su madre le maltrataba tanto física como psicológicamente desde su infancia hasta poco antes de pelear por su primer cinturón. Incluso ofrecía 10 dólares a los niños para que peleasen con él, algo que recuerda con cariño el púgil porque ninguno consiguió ganarle. Según él mismo, las palizas de su madre terminaron haciéndole inmune al dolor y así consiguió buscarse la vida por su cuenta.

Incluso llegó a rozar la muerte poco después de dar el salto a profesional en 2008 como consecuencia de su vida en las calles. Ganó una partida de dardos y, cuando se metió en su camioneta, uno de sus rivales le disparó en la cabeza. Milagrosamente, la bala atravesó la ventanilla, que frenó la velocidad, y solo rebotó en su cabeza al impactar. Fue él mismo el que condujo hasta el hospital para que los médicos le revisasen. Tras este susto, se centró plenamente en el boxeo. Ha sido campeón del mundo en cuatro divisiones distintas (ligero, superligero, wélter y superwélter), siendo indiscutido en la tercera. En septiembre, podrá seguir haciendo historia.

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