“Es posible un podio totalmente español en los Mundiales”

No le tiene miedo a nada. Nacido en Villar de Gallimazo, un pueblo de unos 200 habitantes en la provincia de Salamanca, Mario García Romo (24 años) eligió Estados Unidos para compaginar estudios (Química) y atletismo. Brilló en la NCAA, la liga universitaria, y, ahora, se ha instalado en Boulder (Colorado), donde entrena rodeado de estrellas mundiales. Hace poco más de un mes, en la Diamond League de Oslo, corrió los 1.500 metros en 3:29.18. Se ve capaz de ganar a Jakob Ingebrigtsen y hasta de batir el perseguido récord mundial de El Guerrouj (3:26). También señala el oro en los Mundiales de Budapest (del 19 al 27 de agosto) como objetivo. Antes, este fin de semana (la final, el domingo a las 12:25), en Torrent, intentará revalidar su título de campeón de España en una prueba de nivel excelso, con Mohamed Katir o Adel Mechaal, los líderes de un ‘milqui’ español que está de moda.

Se le ve con mucha confianza.

Sí. Es por todo el trabajo que hay detrás. El talento es una pequeña parte. Estoy trabajando muy bien, no he tenido lesiones y la preparación ha sido perfecta. Puede haber cosas que vayan mal, esto es deporte. Una caída, que no te sientas bien el día de la carrera, etc., pero tengo la seguridad de que hasta hoy he hecho todo lo que tenía que hacer. Estoy en un gran momento de forma, para pelear por todo en Torrent y luego, si me clasifico, en Budapest.

Bajar de 3:30 (3:29.18, en la Diamond League de Oslo) da mucha seguridad.

Sí, de hecho, también por el momento en el que lo hice. Al final, Oslo fue una de las primeras carreras de la temporada. Hacer una marca personal, que conseguí en los Mundiales del año pasado (3:30.20, en Eugene), a principios de junio me dio mucha confianza. Este domingo (Diamond League de Londres), hice 3:31 en una carrera que yo llamaría un poco táctica, porque tuve que liderar bastante. Los tiempos no influyen mucho, esto (Nacionales y Mundiales) son campeonatos, no hay liebres, pero dan confianza. Sé que puedo correr en 3:31 en el peor día y eso aporta mucha seguridad de cara a Torrent y Budapest.

Están haciendo que el 3:30 parezca accesible.

Se ha vuelto mucho más asequible. Hay mucha gente consiguiéndolo y eso hace que se vea más factible. Sabes que si quieres estar en una final mundial tienes que correr en 3:30. Esto creo que es lo que está haciendo que tanta gente esté consiguiendo bajar y se consigan marcas tan impresionantes. El atletismo sigue avanzando y, en unos años, el 3:29 se quedará incluso un poco corto. De hecho, hay mucha gente joven corriendo en 3:32 y 3:33. El récord de España de Katir está en 3:28 y, además de él, yo creo que en los próximos años va a haber varios corredores españoles que van a correr por debajo de ese tiempo.

Tecnología, nutrición, concentraciones en altura... ¿Hay algo que pese más que lo otro?

Es un conjunto de todo. Esto es deporte de alto nivel. Pequeños cambios tienen grandes consecuencias. En una carrera, un toque lo puede cambiar todo, se decide por décimas. Hay que llevar un poco una vida monacal, pero yo lo disfruto mucho, como mis compañeros. Disfrutamos poder entrenar cada día, cuidarnos, promover una vida saludable. Todos prestamos mucha atención a los pequeños detalles.

Llega como campeón a unos Nacionales imponentes.

Tengo muchas ganas de revalidar el título, pero voy a la carrera sabiendo que hay grandes rivales y que, si perdiese, no sería un fracaso. Queda todavía un mes para los Mundiales. Es un primer objetivo, es una primera piedra en el camino a Budapest. Hay un gran nivel y va a haber un gran espectáculo, como el año pasado en Nerja.

¿Cómo visualiza la carrera?

Espero una final a un ritmo honesto. No sé si será lenta, pero se me hace raro pensar en una carrera a 3:50 cuando tienes a gente corriendo a 3:35 en una carrera táctica. Creo que, sobre todo, va a haber gente haciendo movimientos muy fuertes, como Katir, Mechaal, Ignacio (Fontes), Gonzalo (García)... van a ir a por ello y los últimos 400 metros van a ser emocionantes y muy dinámicos.

Usted afirma que puede batir a Ingebrigtsen. ¿Cómo?

Yo creo que se le gana siguiendo, a base de intentarlo. Siempre hay alguna carrera en la que tienes una oportunidad. Las que hemos competido este año, sobre todo, han sido carreras muy perfectas para él, con liebres hasta los últimos 300 metros, una fue en su país, con gente animándole hasta el último momento... Creo que en una carrera de campeonato va a ser mucho más asequible y que todos estamos tratando de llegar en el mejor momento de forma a Budapest, no a Oslo o a Silesia. Él ha estado buscando récords este año, por eso ha sido un poco más complicado, pero en Oslo, incluso, se quedó a menos de un segundo de Katir. Va a haber posibilidades de ganarle y va a haber bastante gente intentándolo.

¿Se imagina un podio completamente español en Budapest?

Sí, es posible, perfectamente. El año pasado ya fuimos tercero y cuarto y había tres españoles en la final. Es una posibilidad y, la verdad, no me extrañaría nada. Viendo a Adel (Mechaal) estas dos últimas carreras, creo que ha estado fenomenal, se le ve muy fuerte y tiene muchísima experiencia. Y bueno, Katir, ya se le ha visto, récord de Europa de 5.000... Yo, pese a que la última carrera no fue la ideal, creo que llego en un estado de forma excepcional y mucho mejor que el año pasado.

Cada vez hablamos más de El Guerrouj. ¿Cuándo va a caer el récord mundial?

Es un récord que hay que respetar mucho, por eso lleva tantos años, pero acabará cayendo, lógicamente, como todos los récords. No sé si será este año, el siguiente... Creo que dependerá mucho de la carrera, de las condiciones meteorológicas, todo influye. Creo que se puede batir, no me parece un récord imbatible, pero hay que tenerle respeto. Ha durado más de 25 años, se batió antes de que yo naciera, pero se puede batir.

¿Usted?

Sí, lógicamente. Tengo 3:29, pero me veo con mucho margen. En Oslo, incluso, creo que tenía margen de mejora y estamos hablando de principios de temporada. Ahora mismo, no te sabría decir dónde estoy, porque no he estado en una carrera rápida este último mes, pero me veo bajando de 3:29, seguramente, y de ahí para abajo habrá que verlo.

Si va, ¿qué hará entre Nacionales y Mundiales?

Seguramente, voy a viajar a Suiza con mis compañeros de entrenamiento y mi entrenador, porque es lo mejor para mí, y estaré en altitud en Saint-Moritz. Luego, antes de los Mundiales, si me clasifico, hablaré con la federación para ver qué es lo mejor en cuanto a desplazamiento e intentar viajar a Budapest de la mejor forma.