El blanco futuro del rey David

Al Manchester le ha temblado la paletilla y se ha visto obligado a salir del armario para reconocer públicamente la única verdad. La que AS les ha venido contando (sin dar un solo bandazo) en referencia al principal objeto de deseo del fútbol europeo: David Beckham. El comunicado oficial que el Manchester colgó ayer en su página web ratifica lo que el gran pueblo ya sabía. Que Real Madrid, Barcelona, Milán e Inter pujan por la contratación del futbolista que genera más ingresos atípicos y que es capaz de abrir, por el impacto de su estética imagen, los mercados de Asia y Estados Unidos. No hizo falta que el Manchester nombrase a las novias que quieren contraer matrimonio con el rey David. La expresión "clubes de Italia y España manifestaron su interés para adquirir los servicios de David Beckham" resulta definitiva. ‘Clubes’, en plural, implica a más de uno. Lo del Barça ya se hizo oficial hace unos días ante el empeño del joven e intrépido Laporta. Queda sólo una posibilidad. Blanco y en botella: el Madrid.

A Florentino le habrá echo poca gracia que el club inglés haya perdido la paciencia. El silencio era el principal aliado del mago que sacó de su chistera los conejos de Figo, Zidane y Ronaldo. El presidente blanco prefería que en estas dos semanas se hablase sólo de la lucha por la Liga, el gran objetivo del año 2003, y que los candidatos a la presidencia del Barça sigan devaluando su prestigio prometiendo fichajes de nunca jamás. Pero Florentino no cambiará su estrategia a pesar de la torpeza del Manchester. Será cauteloso, confía en celebrar ante el Athletic un alirón merecido (al menos para mí) y a partir del día 23 irrumpirá su figura imperial. La que le permite salirse siempre con la suya. David, el siguiente. Llama a la puerta chaval.