El fiable Ferrari de Del Bosque
Que Vicente del Bosque se convierta desde hoy en el técnico con más partidos en la exigente pizarra del Real Madrid tras el legendario Miguel Muñoz revela una realidad aterradora. El banquillo del Bernabéu ha estado electrificado históricamente y hasta las cinco Copas de Europa tuvieron varios padres desde la banda. Parece que Del Bosque llegó ayer (apenas lleva tres años y medio desde que sustituyó al arrogante de Toshack), pero el hecho es que sin sacar pecho, para que no se lo partan, ha conquistado dos Copas de Europa, una Liga, una Intercontinental, una Supercopa de Europa y una de España como quien no quiere la cosa. Prefiero no pensar en las bravuconadas que hubiésemos aguantados de Fabio Ego Capello o de JB si el italiano o el galés llegan a coleccionar semejantes tesoros.
Pese a todo no esperen gestos altaneros de Del Bosque, que ha pasado por la derecha y por la izquierda como un Ferrari a ilustres como Beenhakker, Boskov, Miljanic, Antic o el propio Di Stéfano sin alardes de ningún tipo. Yo que Florentino Pérez, poco dado a los espectáculos mediáticos innecesarios desde que llegó a la presidencia, renovaría a este sabio de Salamanca. Es un hombre que por su magnífica educación jamás pediría el carnet a un periodista, sabe perdonar las chiquilladas de sus jugadores y llevar la manada con la sabiduría de un jefe de la tribu. Florentino y el candidato Vicente deberían fumar juntos la pipa de la paz y renovar su unión matrimonial. Sir Alex del Bosque lo tiene todo. Vicente, bueno para el Real Madrid.