Baloncesto | Pedro Ferrándiz

"Yo que el Madrid ficharía ahora a Gasol"

Pedro Ferrándiz fue distinguido ayer con la Gran Cruz de la Real Orden del Mérito Deportivo, tras aprobarlo el Consejo de Ministros, a propuesta de Carlos Escudero. A sus 74 años, sigue siendo el maestro e ideólogo incombustible del baloncesto.

¿Cuando alguien recibe el Collar de la Orden Olímpica, la Medalla de Oro del CSD y ahora la Gran Cruz de la Real Orden del Mérito Deportivo es que se está haciendo uno mayor?

—¡Hombre!, uno se siente halagado por tanta distinción, pero al menos lo estoy disfrutando en vida. Lo que no soportaría es tanto premio postmorten.

Lo más curioso es que usted dejó el banquillo del Madrid en 1975 y ha logrado mantener intacto su prestigio hasta ahora.

—Supongo que ha sido porque gracias a la Fundación Ferrándiz hemos investigado el aspecto cultural del baloncesto. Tuve un proceso de hastío con el baloncesto español y durante ocho años no fui a ver un solo partido a nuestras canchas...

¿Y qué hizo en ese tiempo?

—Gracias a mi trabajo con la FIBA me recorrí el mundo entero y conocí más de ciento cincuenta paises, lo que me enriqueció en todos los sentidos.

En ese tiempo dicen que también aprendió a no despreciar ninguna invitación a comer.

—Eso me lo enseñaron los periodistas. Lo extraño es que últimamente han pagado ellos varias veces, por lo que debe ser que me queda poco...

No se haga el modesto, aunque es cierto que usted siempre veneró la figura de Raimundo Saporta.

—Es que él me enseño casi todo lo que sé. Saporta me adiestró sobre cómo manejarme con tíos de dos metros que sólo con soplar podían tumbarme. Con los jugadores no hay que compadrear, sólo ganarse su respeto. Saporta era un genio y nunca se le hará suficiente justicia.

No se queje, porque le han recordado millones de veces lo de la famosa autocanasta.

—Nunca se harta uno de que le rescaten de la memoria una genialidad. ¿No estuvo mal, verdad? En aquella época gané cuatro Copas de Europa. Algo de esto debía saber.

¿De qué le vale ser tan bueno si no es capaz ahora de salvar esa sección del Real Madrid que lleva muchos años dando tumbos?

—Yo bastante tuve en su día. Está claro que Imbroda es un hombre con buenas ideas y que tiene tarea por delante. A bote pronto se me ocurre que el Madrid podría ahora intentar fichar a Gasol, aprovechando que tiene problemas con su nuevo entrenador. También se debió fichar este verano a Bodiroga. La solución del Madrid es tener siempre a los mejores... y que el baloncesto vuelva a darse en abierto.

Usted ya ha cumplido con ese tomo de la colección de AS que es un homenaje al baloncesto.

—Ha sido clave la labor de equipo de la Fundación. Es un orgullo haber cerrado el único hueco que le quedaba a una colección tan rica en contenidos y en historia.

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