Camacho se va hoy

Por fin, hoy habrá fumata blanca. José Antonio Camacho tomó una decisión definitiva sobre su futuro y ayer comunicó a Gerardo González, secretario general de la Federación Española de Fútbol, que no cumplirá los dos años de contrato que le restaban como seleccionador nacional y que no seguirá al frente del equipo. En el seno de la Federación sentó como una bomba de relojería la negativa del entrenador murciano a continuar en el banquillo de España, pero Camacho argumentó sus razones para tomar una decisión con la que está seguro de que saldrán ganando todas las partes.

Hoy, a las 13:00 horas, el técnico tiene pensado convocar a todos los medios de comunicación en la sede federativa (Alberto Bosch, 13) para hacer públicos los motivos que le llevan a dejar la Selección después de casi cuatro años al frente de la misma, en los que ha firmado una meritoria clasificación en la Eurocopa de 2000 (tras caer en cuartos de final ante Francia, posterior campeona) y un quinto puesto en el Mundial de Corea y Japón, el mejor que ha firmado España desde 1950. El que será desde hoy ex seleccionador nacional ha meditado mucho desde su regreso a España, el lunes de la semana pasada la decisión de no cumplir los dos años que le restaban de contrato con la FEF. Ya le avisaba a Tomás Guasch en AS el pasado jueves que "los ciclos se acaban". Era una premonición en toda regla. Camacho ha sopesado los pros y los contras de tan drástica determinación, y ayer comunicó personalmente a Gerardo González (el presidente Villar continúa en Tokio), en el transcurso de una comida en un restaurante madrileño, que consideraba irrespirable el ambiente que en determinados entornos se había creado respecto a su figura.

Camacho no entiende que a pesar de que tuviera la Selección un recibimiento triunfal en Barajas y que se viera fuera del Mundial únicamente por una actuación arbitral parcial ante la anfitriona Corea, varios medios de comunicación cuestionasen su preparación del equipo para el torneo y sus decisiones durante los cinco partidos que España disputó a lo largo del Campeonato. Camacho explicó a la Federación que se veía venir que este ambiente nocivo podría perjudicar al equipo nacional en un futuro inmediato. El técnico tiene claro que si se le ha discutido a pesar de un quinto puesto mundialista histórico, qué no podría suceder ante la inminente Eurocopa de Portugal, un torneo con mayor nivel competitivo que el reciente Mundial.

"Será mejor para todos. Gana la Federación, que podrá darle a mi sucesor una planificación ya desarrollada, y gano yo, que no puedo trabajar con tanta gente dudando de mi labor". Con este espíritu Camacho quiso dejar claro que su decisión no era egoísta y que no veía mejor salida tras lo ocurrido en Corea. La decisión de Camacho deja a la Federación sin margen de maniobra: el 21 de agosto la Selección vuelve con un amistoso en Budapest ante Hungría (homenaje a Puskas) y el 7 de septiembre se mide a Grecia en Atenas en el primer partido de clasificación de la próxima Eurocopa. Y los mejores técnicos están colocados.