Hungría, última llamada para Las Guerreras

El tren a Lille ya no pasará más. Las Guerreras apurarán desde las 14:00 horas de este jueves ante Hungría sus últimas opciones matemáticas de estar en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos. Sería una gesta, e iría contra todos los pronósticos admitiendo que han perdido los tres primeros partidos (Brasil, Angola y Países Bajos) y su diferencia de goles es de -21. Pero las chicas de Ambros llevan una semana intentando reencontrarse, dar con las sensaciones correctas. El deporte esconde, a veces, grandes historias. Veremos si es ahora.

España tiene una ventaja. Ambros Martín, el técnico de Arrecife, conoce al dedillo el balonmano húngaro. Allí es toda una institución, ya que colaboró desde su puesto de entrenador a que el Györi ganase cuatro Champions. También trabajó en la Federación con Gabor Elek. Lógico, pues, que conozca las grandes fuerzas de Hungría. La principal, Petra Vamos, una extraordinaria primera línea que ya estuvo en los Juegos de Tokio y a la que acaba de fichar el Metz pagándole al Debrecen su salida. Jugará en Francia la próxima temporada. Viktoria Lukacs, Nadine Schatzl y Greta Marton son otras de las jugadoras destacadas de un equipo que, bajo el mando de Vlagyimir Golovin había despertado grandes expectativas en el país magiar, ya que había ganado el Mundial juvenil de 2018, en el que Hungría fue anfitriona (y campeona). De momento, las expectativas han descendido, pero la manera de rescatar un punto contra Angola este martes ha levantado la moral de la tropa.

Algo así debería pasar con Las Guerreras, para quienes debería ser una motivación tener aún opciones reales de estar en cuartos. De momento, no obstante, han estado muy lejos de las rivales, Brasil y Angola incluidas. Sobre el papel, han demostrado estar un escalón por debajo del resto, pero su obligación es no darse por vencidas. Las veteranas, con Merche Castellanos, Shandy o Lara Gonález a la cabeza, han intentado levantar la moral de la tropa. No es fácil, sin embargo, en un equipo que se ha visto tan lejos de las victorias en los tres partidos. Las Guerreras necesitan un momento de magia en el que todos los astros se alineen y hagan posible la una metamorfosis que las lleve a los cuartos de Lille. Siempre hay una oportunidad.