Zubieta controla la sala de máquinas de la Real

Zubieta vuelve a dar un paso al frente. Como siempre es que se le necesita. En este caso, ha habido dos bajas en el centro de campo muy relevantes. Han dejado la primera plantilla el capitán, Asier Illarramendi; y Ander Guevara, el guardaespaldas de Martin Zubimendi. Es indudable que la medular queda tocada con esas dos bajas. Sobre todo a la hora de hablar de fondo de armario. Y la primera tentación es acudir al mercado de fichajes para ver qué te ofrecer. Pero en la Real Sociedad, no. Las cosas no suceden así. Tiene Zubieta para cubrir las bajas. Y si en una posición determinada le ofrece garantías de recambio, ¿para qué traer algo de fuera?

Esa pregunta se la han hecho en la planta noble de Anoeta, y la respuesta ha sido que Zubieta tomará el control de la sala de máquinas de la Real Sociedad esta próxima temporada. Porque no se va a fichar para cubrir las bajas que ha tenido el equipo realista en el centro de campo. Se va a echar mano de lo que le ofrece la cantera, que es muy bueno, tiene mucho futuro y lleva tiempo llamando a la puerta del primer equipo. Porque las salidas de Illarra y Guevara van a ser cubiertas por Beñat Turrientes y por otros dos ‘potrillos’ que hacen la pretemporada a las órdenes de Imanol Alguacil y que durante la temporada estarán ya en dinámica del primer equipo. Se trata de Jon Ander Olasagasti y Urko González de Zárate.

En realidad se trata de un relevo generacional de lo más natural. Se marcha el capitán ya con 33 años y le coge la alternativa un Beñat Turrientes todavía en edad sub-21 y que tiene ante sí la oportunidad de jugar y destacar que se le negó la campaña pasada con Illarra y Guevara por delante. El besaindarra de 21 años es uno de los jugadores más prometedores de las nuevas generaciones que vienen de abajo en Zubieta. Un futbolista en el que se tiene mucha confianza y al que se trata con mucho mimo. Imanol está muy encima para que siga evolucionando, y le exige casi más que al resto, consciente del potencial que tiene. Un poco al estilo de Pacheco cuando llegó al primer equipo, y hoy está afianzado en el primer equipo. En el caso de Olasagasti es un futbolista que siempre que se le ha requerido arriba, ha cumplido, mientras se convertía en el jugador clave del centro del campo del filial. Y Urko González de Zárate tiene el handicap de que en el Sanse jugaba de central cuando su puesto natural es el de pivote, que es donde más le ve también Imanol. Es un jugador de mucho potencial que se ha estancado algo esta última campaña. Ellos son los herederos de los huecos libres en la medular h no se fichará. Otra cosa es para la mediapunta, el puesto de David Silva, para quien se le busca una alternativa para cuando no pueda jugar.