Mou anula a Xabi

El alumno no pudo con el maestro. No pudo con él porque ese maestro, una vez más, levantó un muro de hormigón que impidió al Bayer Leverkusen de Xabi Alonso anotar ese gol que le hubiese permitido pelear por la final después del 1-0 de la ida en el Olímpico de Roma. Pero los pupilos de José Mourinho no se despeinaron en ningún momento en el BayArena y firmaron un empate a cero que le llevó a la finalísima de Budapest, dejando por el camino al que fue su fiel escudero durante su etapa en el Real Madrid.

El choque en el BayArena comenzó como era de esperar. Los de Mourinho optaron por aparcar el autobús delante del marco protegido por Rui Patrício y los pupilos de Xabi Alonso fueron desde el principio a por el tanto que volviera a meterles en la eliminatoria. Fueron mejores los alemanes. Y se acercaron una y otra vez, eso sí, sin encontrar ese último pase para derrumbar el muro defensivo romano. El que más cerca estuvo fue Diaby en un gran disparo que se estrelló en el travesaño. Quería el Bayer, pero no pudo ante una Roma en la que Spinazzola tuvo que marcharse lesionado.

La cosa no cambió en los segundos 45 minutos. Wirtz, ese jugador que suele aportar la magia en el conjunto de las aspirinas, no podía respirar dado que tenía como minimo a dos futbolistas de la Roma encima de él en cada momento. Aun así, no se rindió el conjunto de la Bundesliga. Siguió a lo suyo. Y la Roma a lo suyo, buscando rascar segundos del reloj en cada acción que lo permitía. Y Xabi fue a por todas. Hlozek por Palacios y Adli por Bakker. Pura pegada. Pero la tuvo Azmoun. Su disparo desde el punto de penalti rozó el palo izquierdo. Más de Xabi. Amiri por Tah. Toda la carne en el asador. Pero el muro de Mou se mantuvo en pie. Y llevo a los suyos a la final.