El Lyon trunca el debut europeo de Mendilibar

Tras una derrota dolorosísima frente a su máximo rival, el Marsella, el Olympique de Lyon truncó el debut en la Europa League del Olympiacos de José Luis Mendilibar. Gracias a un excelente Rayan Cherki, que abrió la lata en el segundo tiempo con un latigazo inapelable, y a Benrahma, prácticamente después del 1-0, los franceses consiguieron un triunfo balsámico, 2-0, que cicatrizó la herida que se había abierto con su flojo inicio de temporada.

No sufrió, pese al resultado, en exceso el Olympiacos de José Luis Mendilibar en el primer tiempo, a pesar de un arreón inicial del Lyon, que intentó enmendar desde el comienzo su derrota, dolorosa derrota, ante el Marsella el domingo. Los de Sage jugaron mucho tiempo en campo rival, pero en ningún momento dieron la sensación de sembrar el pánico en la defensa griega.

Los helenos, bien plantados, pudieron incluso adelantarse en el marcador. En el ecuador de la primera parte, Rodinei, un lateral derecho profundo y con mucha potencia para arrancar en la banda, remató con la izquierda a la escuadra y se topó con una mano milagrosa de Perri.

El Lyon tuvo ocasiones, ninguna clarísima, forzando dos intervenciones de Tzolakis. El portero del Olympiacos atrapó, sin grandes complicaciones, un remate de Nuamah con la derecha, para después, antes del descanso, evitar, con el pie, un disparo de Tolisso sin prácticamente ángulo escorado en la derecha.

La resistencia del Olympiacos duró 65 minutos en Francia, no sin antes volver a encoger el corazón de los aficionados del Lyon, después de dos llegadas, la primera de Yaremchuk que salvó a bocajarro Perri y la segunda de El Kaabi, a un palmo de conectar un fantástico centro de Rodinei, que pudieron decantar la balanza a favor de los de Mendilibar.

El talento individual del Lyon fue lo que decidió la contienda. El partido estaba embarullado, pero un descomunal Rayan Cherki, apartado en agosto y casi vendido al Dortmund en junio por 15 millones, destrozó la red con un remate extraordinario con la derecha. Cuando todavía estaba digiriendo el golpe el Olympiacos, Zaha, que debutaba con los franceses, asistió a Benrahma para que el éste, con un toque sutil, aumentara la renta de los de Sage. El Olympiacos, herido, intentó, sin éxito, buscar una reacción. Y la tuvo, pero el gol de Caleta-Car en propia puerta en el minuto 87 fue anulado por un milimétrico fuera de juego de Willian. Un triunfo balsámico para el Lyon, después de la cruel derrota el pasado fin de semana contra el Marsella.

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