Aspas, en casa de Boban

El ídolo de la infancia de Iago Aspas fue Mostovoi, que reinó en el Celta a finales de los 90 y principios de los 2000. Ese trono se vio amenazado con la llegada de Boban en el verano de 2001, un jugador de clase mundial que lo había ganado todo con el Milan y que rozó la final del Mundial con Croacia en 1998. Sin embargo, Víctor Fernández no supo acoplar a los dos geniales futbolistas en el mismo once, un error imperdonable que privó a Balaídos de ver a uno de los mayores talentos que vistió de celeste. Boban duró tres meses en Vigo, defendió el escudo con la cruz de Santiago durante 360 minutos, seis horas justas, y solo compartió escena con el Zar durante 68 minutos, poco más de una hora. La estrella croata prefirió colgar las botas antes que seguir ahogándose en el banquillo. Su carrera exigía un papel protagonista, prefirió marcharse a casa antes que ser un secundario de poca monta.

Han pasado 24 años de aquella retirada furtiva. Las nuevas generaciones de celtistas ni conocerán esta historia, los no tan jóvenes, como Iago Aspas, siguen pensando qué hubiera pasado si Víctor Fernández encajase las piezas. El Celta de Mostovoi fue el mejor de la historia, Boban era la tecla perfecta para seguir superando pantallas después de haber perdido la final de Copa. Pero lo que pudo ser, no fue.

Aspas creció idolatrando a Mostovoi, pero seguramente haciéndose esa pregunta de qué hubiera pasado si Boban mostrase su talento en Vigo. Nunca lo sabremos. Lo que sí podrá comprobar Boban desde el palco, al lado de su homóloga Marián Mouriño, es que Aspas fue capaz de destronar a Mostovoi como leyenda absoluta del Celta. Lo que el croata no logró, lo hizo un chaval de Moaña. Aspas saldrá al Maksimir liderando a su equipo del alma y, quizá, también pensando por qué Boban no triunfó en Vigo (sigue el partido de hoy en directo en As.com).

Iván Villar, bajo palos.

La ausencia por lesión de Ionut Radu abre las puertas de la titularidad a Iván Villar, que esta temporada únicamente disputó el partido de primera ronda de Copa contra el Puerto de Vega. El meta rumano está siendo uno de los jugadores más destacados del Celta en este arranque de temporada, mientras que el cancerbero de Aldán fue uno de los descartes durante el pasado verano, pero prefirió continuar en Vigo. La lupa estará sobre su actuación en un estadio que será un infierno ambiental para el Celta.

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