Sombras y luces en el inicio… pero sin preocupación
“Mentalmente estamos fuertes, tenemos que creernos de lo que somos capaces”, señala el portero Alex Remiro.
La Real Sociedad está dejando luces y sombras en este inicio de la temporada liguera. Las luces en la primera parte, cuando ha marcado los dos goles que lleva. Las sombras en las segundas mitades que es cuando ha recibido los dos goles que le han impedido en las dos primeras jornadas sumar la victoria. Resulta sorprendente cómo el equipo de Imanol Alguacil ha mostrado dos caras tan diferentes hasta el momento. Porque poco tiene que ver el nivel que ha mostrado antes y después del descanso.
En los dos partidos que ha jugado hasta el momento, ambos en casa, le ha pasado lo mismo. Se ha adelantado en la primera parte, practicando un buen fútbol y dominando a sus rivales. Y se ha dejado empatar de manera inexplicable a la vuelta de vestuarios, dejando de hacer todo lo bueno que venía haciendo hasta el descanso, bajando sus prestaciones físicas, no siendo dominador con la pelota y pasando a defender mal en líneas generales. Aún así, pese a esas diferencias tan evidentes, no hay preocupación en el vestuario realista. Porque sólo han pasado dos jornadas, y porque el equipo ha mostrado buenas sensaciones, a pesar de no haber podido sostenerlas a lo largo de los 90 minutos. “Si me preguntas a mí personalmente, te digo que no estoy preocupado. Veo al equipo entrenar, veo como afrontamos las derrotas, o los empates en este caso... Mentalmente estamos fuertes, tenemos que creernos de lo que somos capaces”, señala el portero Alex Remiro.
El portero de Cascante, erigiéndose en algo así como portavoz del equipo realista, analiza también el aspecto físico, porque parece bastante claro que los jugadores de la Real no están todavía al 100%. “Es verdad que, en los dos partidos, no hemos acabado bien a nivel físico, pero es el nivel del fútbol ahora... Mucho físico y luego a jugar. Nosotros queremos jugar, pero ahora mismo físicamente no nos da. Tenemos que aprender de los cuatro puntos que se nos han ido y que no nos vuelva a pasar”, dice.
Aunque es inevitable el cabreo que puede sentir Remiro por haber dejado escapar dos puntos contra el Celta en la última jornada, después de su estelar actuación. “Pero es que estuvimos mal, acabamos defendiendo fatal y tuvieron tres o cuatro claras al final. Si me dices que fue un partido abierto, de tú a tú, pues ya está, como el día del Girona, pero tuvimos el control del partido hasta el minuto 60 o 65, y luego nos metimos atrás, y empezamos a fallar muchos pases, a perder duelos, a llegar tarde, a no parar el partido...”, se queja Remiro, que lanza una frase que debe servir para reflexionar. “No fuimos como tiene que ser un equipo que quiere aspirar a acabar lo más arriba posible”.