Uzuni frena al líder Alavés

El Granada de Paco López conquistó tres meritorios puntos frente al líder Alavés en un encuentro frenético durante los primeros 45 minutos y sin apenas emoción durante los segundos. El templo nazarí volvió a mostrarse inexpugnable (23 puntos de 27 posibles) y ayudó a los suyos a remontar un encuentro que frena la positiva racha de los vitorianos, que pese a la derrota conservan el liderato, y vuelve a meter a los andaluces en los puestos de playoff.

La primera mitad fue una auténcia locura. Tres tantos, uno más anulado, un penalti señalado pero corregido por el VAR, otro penalti que sí se pitó, un lanzamiento desde los once metros detenido por el portero y una roja directa. Casi nada. Pero vayamos por partes. El encuentro comenzó con mucho ritmo. Tanto Alavés como Granada querían llegar rápido a la portería contraria y el balón iba de una área al otra muy rápido. El primero en golpear fue el conjunto nazarí con el omnipresente Uzuni. El albanés marcó el primero de la noche, pero fue anulado por fuera de juego. Era un aviso de lo que nos tenía preparado el máximo goleador de la categoría. Ricard también mostraba su potencial ofensivo con un lanzamiento desde fuera del área que atajó sin problemas Sivera. Sin embargo, fue el Alavés el que se adelantó en el marcador. Gran jugada colectiva con dos protagonistas: De la Fuente, que asistió, y Alkain, que marcó con mucha calidad con el exterior de su pierna derecha. Nada pudo hacer Adrián López, tercer portero que fue titular por las ausencias de Ferreria, lesionado de larga duración, y Raúl Fernández, que cumplía un partido de sanción. Fue el único lanzamiento de los babazorros durante una primera mitad que adquirió un marcado color rojiblanco con el paso de los minutos.

Porque los de Paco López supieron reponerse al tanto de Alkain para darle la vuelta al marcador en unos frenéticos 45 minutos. Los nazaríes le metieron una marcha más al encuentro y liderados por la velocidad de Callejón y Uzuni percutieron la meta de Sivera hasta encontrar su premio. En el 19′ el colegiado López Toca señaló penalti por una mano en el área vitoriana que, corregido por el VAR, fue inexistente. Cuatro minutos después Uzuni aprovechó una mala salida de balón de la zaga de los de Luis García para definir a placer. Miguel Rubio se adelantó a la delantera visitante y su rechace le llegó al albanés, que no perdonó. Sí lo hizo dos minutos más tarde en un nuevo mano a mano, ya que al intentar la vaselina se golpeó con el césped. Eran los mejores minutos de un Granada que quería más. Y el premio no tardó en llegar. Esta vez sí penalti por mano de Guridi. Uzuni lanzó ajustado, Sivera se lució pero el punta no perdonó y aprovechó el rechace para hacer su décimo tanto en lo que llevamos de campaña y poner fin así a una sequia de siete encuentros sin celebrar un tanto. El Granada, con un Los Cármenes entregado, volteaba el resultado por méritos propios y dejaba bien a las claras que el templo nazarí iba a seguir invicto una jornada más. Pero la jugada que marcaría el devenir final del partido sucedió cerca del área local. Alkain perdió los nervios y le dio una patada a Callejón ya sin balón de por medio. El árbitro, muy cerca de la jugada, no lo dudó y dejó al Alavés con un hombre menos. Problemas para Luis García, quien además vio cómo De la Fuente, uno de sus mejores jugadores durante la primera mitad, tenía que ser sustituido por lesión antes del descanso.

El ritmo bajó revoluciones en el tramo final de la primera parte aunque, tras el paso por vestuarios, el Granada salió a matar el partido. Supo gestionar su superioridad numérica abriendo el campo en ataque y juntando líneas cuando tocaba defender para buscar la velocidad de las contras. Y así llegó la sentencia. Uzuni robó en campo propio, avanzó por el costado izquierdo y vio el desmarque de Jorge Molina. El veterano delantero definía con clase y marcaba así su primer tanto este curso. Apenas habían pasado cinco minutos de la reanudación y la sensación era que los tres puntos se quedaban en Los Cármenes. Así fue. Porque con ese 3-1 en el marcador el Granada se hizo con el control total del partido y se dedicó a tocar y tocar para desgastar a un rival que notaba con el paso de los minutos su inferioridad numérica en el campo. No renunció a buscar el segundo tanto que le diese alguna opción de meterse en el partido, pero sin acierto. El que más cerca estuvo fue Hana, quien salió en la segunda parte, pero su débil lanzamiento lo detuvo sin problemas Adrián López. Ambos entrenadores movieron el banquillo para meter algo más de frescura, lo que también ayudó a que el ritmo fuese bajando con el paso de los minutos. El Alavés no podía, mientras que el Granada tampoco quería arriesgar demasiado. La entrada de Bryan dio algo más de mordiente en los minutos finales a un equipo nazarí que recupera la sonrisa tras vencer al líder. Ahora debe refrendarlo en su visita al Málaga en un nuevo examen a domicilio. Por su parte, el Alavés mantendrá el liderato pero tendrá muchas ausencias en su partido entre semana frente al Tenerife, también lejos de Mendizorroza.