“No me dijeron que me fuera, fue una decisión mía”

Cedric Omoigui ha dejado el Racing para recalar en el nuevo proyecto de Romo en el Ibiza en calidad de cedido, aunque con opción de compra. 71 partidos oficiales le contemplan con la camiseta del Racing en 4 temporadas. Fue fundamental para clasificar al Racing para jugar en Primera RFEF y luego todavía más para el ascenso a Segunda, donde fue pichichi con 16 goles. Atiende a AS y a ‘SER Deportivos Cantabria’ desde Ibiza y le recibimos con un audio de la afición cantando el clásico “El portero está cagado, Cedric is on fire”, con la música que diseñó Gala Rizatto para ‘Freed from desire’.

¿Qué se siente al ser tan querido por la afición, que se lo demuestra cada partido?

Mucho agradecimiento, no somos nada comparado con jugadores de élite y que la afición te trate como un ídolo, y con ese respeto y cariño, es impagable.

Después de un año duro, con una enfermedad/lesión muy seria, imagino que fuera un apoyo fundamental...

Ya antes de la operación desde fuera se veía que algo pasaba y siempre me apoyaron. Al final lo pudimos detectar y me intenté recuperar por mi y también la afición, no pude devolverle el cariño con los minutos que me hubiera gustado pero tuve la recompensa con ese partido último con gol frente al Cartagena.

Ahora ya no le van a poder animar con la camiseta del Racing porque se ha ido al Ibiza. ¿Cómo se fraguó su marcha?

Al final de la temporada pasada el Racing tenía la decisión tomada de buscarme una cesión para volver a sentirme importante. Tras las vacaciones llegué con muchas ganas de demostrar, me sentí que podía ser uno más, igual porque no había muchos delanteros, pero vi que me daban confianza que a lo mejor no vi la temporada anterior. Pude hacer gol (al Alavés) y a mitad de pretemporada intenté hablar con el club para ver la idea que tenían, para poder tomar una decisión con tiempo. En ese momento estábamos de acuerdo en seguir, pero esto es fútbol y el mercado puede hacer que te cuadren jugadores que antes no. Al final de mercado hablé con José Alberto y me fue honesto, podían llegar 1 o 2 delanteros y con eso, viendo que las dos primeras jornadas no habían sido las mejores para mi, tomé la decisión junto con mi agente y mi familia de que lo mejor era salir y aprovechar los minutos que me pueden brindar en Ibiza.

Justo antes de comenzar la Liga dije que Cedric estaba por delante de Matheus y que le habían garantizado su continuidad. ¿Era cierto o metí la pata?

Me dijeron que sí que confiaban en mi, pero sabemos que esto es fútbol y no di por hecho que me iba a quedar. A mi no me dijeron que tenía que salir, fue una decisión mía, el hecho de ser 4 delanteros para un puesto y que no partía con los minutos que pensaba en pretemporada me motivó a tomar la decisión de salir cedido. Pero en ningún momento me dijeron de salir y fui yo el que decidió hablar con ellos. Ahora, con suerte me podrán ver 90 minutos, 60 o lo que sea y me podrán conocer y seguir de cara al futuro.

Ha habido más clubes llamando a su puerta y se ha decantado por el Ibiza. ¿Por qué?

Es verdad que tenía más ofertas. Cuando las valoro y veo lo que transmiten los clubes lo tuve claro, no es lo mismo ir a rellenar a que te aseguran que vas a ser importante. Romo me llamó en su segundo día en Ibiza y no paró hasta que tomé la decisión.

El Ibiza tiene una opción de compra sobre Cedric, ¿es asequible?

Eso queda muy lejano, Racing e Ibiza creían que era lo mejor, si lo quieren así por mi no hay problema. Ahora lo que me interesa es empezar, jugar y demostrar. Voy, entre comillas, con un poco de presión porque he visto el revuelo generado en Ibiza y quiero demostrar que Cedric sigue vivo y que tiene muchas ganas de seguir haciendo goles y recuperar la sonrisa.

¿Lo entiendo como un adiós definitivo a Santander?

Santander es mi casa. Cuando digo que nos volveremos a ver es porque por una cosa u otra volveré, ya sea como aficionado, amigo o jugador, la opción de compra está ahí y veremos.

Tiene a su disposición estas líneas para despedirse de la afición.

Muchísimas gracias por todo el apoyo que me han dado, prefiero que hablen más de Cedric como persona que como jugador, aunque les haya dado alegrías con goles. Sé que hay gente que a lo mejor me llamará ‘tribunero’, pero me gusta estar con la gente y estar con los niños, salir de la burbuja del jugador que parece que no le puedes tocar ni acercarte a él. Conmigo pueden contar y soy un amigo para todos ellos. ¡Nos veremos!