La preocupante cara lejos de El Arcángel

El Córdoba de Ania tiene una gran asignatura pendiente: los partidos fuera de casa. En una hipotética clasificación de la Liga, el cuadro blanquiverde figuraría como colista al presentar un balance de tres derrotas en tres encuentros en los que ha encajado ocho goles y sólo ha metido dos. En la categoría, es junto al Elche el único que aún no ha puntuado lejos de su estadio.

La puesta en escena de los partidos del Córdoba guarda relación con la idea del entrenador de intentar tener posesión rápido a través de una presión alta o la salida de balón jugado desde atrás. Sin embargo, el cuadro blanquiverde no presenta números convincentes cuando sale de El Arcángel, donde sí ha encontrado la fórmula para que su juego le genere puntos. De hecho, en casa ha hecho cinco puntos sobre nueve posibles que incluso pudieron ser alguno más en función al desarrollo de las contiendas ante el Burgos o el Málaga. Por ello, la lectura fue la de un equipo con “dos caras diferenciadas”.

Lo cierto es que el Córdoba ha tenido tres maneras de perder en la presente temporada como visitante. La primera, en Miranda de Ebro, se produjo en la jornada inaugural del campeonato por 1-0. El cuadro blanquiverde, pese a tener la posesión del balón, se topó con un gran Raúl Fernández en portería para un Mirandés al que le bastó una transición para concretar su triunfo.

Tal vez, la peor cara del Córdoba en lo que va de Liga se presentó en el encuentro del Martínez Valero, en el que fue minimizado a través del balón por el Elche. Ahí se vio a un equipo desdibujado perdiendo su filosofía de juego y cometiendo errores groseros en defensa, incluyendo dos penaltis evitables. Al final un 3-1.

Llegaron los partidos de casa ante el Málaga y el Deportivo de la Coruña. Entonces, el Córdoba recordó a la de la temporada anterior en Primera Federación. Tanto es así que el término “reconocible” se utilizó por varios protagonistas en la sala de prensa. Pero esa idea no tuvo continuidad en El Alcoraz. Un penalti torpe de Calderón, una blanda defensa tras un saque de esquina del Huesca y una pérdida de balón de Álex Sala propiciaron un 3-0 en media hora que fue insalvable. Al menos, en el encuentro, tuvo opciones de reengancharse y prueba de ello es que Antonio Hidalgo, entrenador del Huesca, reconoció haber “sufrido” durante la contienda. Pero el Córdoba se volvió de vacío y con un 4-1 en el marcador.

El calendario de competición presenta al Córdoba dos salidas a comienzos del mes de octubre. El domingo 6, a las 21:00 horas, se medirá al Albacete Balompié en el Carlos Belmonte, mientras que el domingo 13 hará lo propio en Los Cármenes contra el Granada. Ahí se verá si Ania y su equipo han dado con la fórmula para que salir de El Arcángel deje de ser la pesadilla que, de momento, sigue en Segunda División. De hecho, en la última temporada en Segunda, la 18-19, sólo sacó adelante un partido en Liga a domicilio en el Heliodoro Rodríguez de Tenerife por 0-2.

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