Jaime Mata, un líder en la sombra

Sin apenas jugar en ocho jornadas, Jaime Mata es uno de los líderes del vestuario. Desde la sombra del banquillo, el veterano delantero no ha cejado en su compromiso y su profesionalidad con la UD Las Palmas. Sin una queja y con un papel preponderante de mentor de los más jóvenes y de apoyo para Kirian Rodríguez durante su recuperación.

Ya en septiembre, en la previa del Burgos, Luis García resaltó que el madrileño “es un ejemplo extraordinario para los jóvenes y menos jóvenes” para enseñar lo que es y debe ser un futbolista profesional. “Haber pasado por lo que ha pasado -sobre su mala racha goleadora y sus rumores de marcha-, que no esté teniendo minutos y ayude de esta manera…”, ensalzó el técnico amarillo.

Por aquel entonces, el asturiano desgranó que Mata es un jugador “muy aprovechable” en ciertos contextos de bloques muy bajos para poder atacar la situación con centros, un contexto que le hizo disfrutar de sus primeros minutos ante el Cádiz, tras sustituir en el minuto 85 a Manu Fuster.

Justo tras saltar al césped llegó el gol de Barcia, por lo que el encuentro cambió y el 7 tuvo que adoptar más acciones defensivas y ser el desahogo amarillo contra un Cádiz volcado hacia la portería de Horkaš. Y aún así tuvo tiempo de generar dos ocasiones, aunque en fuera de juego ambas.

Preguntado en sala de prensa en la previa del Granada por Mata tras su debut, Luis García destacó que el ariete encarna lo que es “ser futbolista y considerarse parte de un colectivo”. Más allá de un jugador que “ayuda una barbaridad en el día a día”, el asturiano lo considera “un tío extraordinario” que quizás participa “menos de lo que merece por lo que aporta cada día”.

Durante las siete jornadas en las que estuvo inédito no paró de trabajar como el que más en Barranco Seco y celebrar los goles grancanarios como si fueran suyos. Un ejemplo que valoran ampliamente en el cuerpo técnico y en el vestuario de la UD Las Palmas.

Un apoyo para Kirian

En la reciente entrevista de Diario AS con Kirian, el tinerfeño destacó a Jaime Mata como un gran apoyo en el vestuario durante su proceso de recuperación. “Personalmente me está ayudando mucho cuando me insiste con que llegó con 29 años a Primera División y fue internacional con España tras estar en Primera con la edad que tengo ahora. Siempre me dice que tengo tiempo para volver a jugar 6-7 años en Primera División, y sobre todo porque piensa que tengo las condiciones y cualidades para poder hacerlo”, recordó.

Esa enseñanza le transmitió la calma de hacerle ver que “si sigo siendo profesional y trabajando de esta manera lo mismo me quedan muchísimos años y puedo volver a disfrutar el fútbol de élite”.

“Siempre desayunamos juntos, tenemos una gran relación porque es una persona increíble y un profesional que aporta muchísimo a un grupo y a un equipo”, añadió en la entrevista con Diario AS.

Más recientemente, Kirian volvió a hablar de Jaime Mata e incluso volvió a incidir en la rutina de los desayunos, incluso cuando el 20 no estaba en Barranco Seco. “En cada desayuno siempre tenía una llamada perdida cuando yo estaba con la quimioterapia (se ríe). Lo hacía aunque sea para verles las caras y transmitirme sonrisas y apoyos. Ha sido una persona muy importante”, valoró.

Para Kirian, la pérdida de Benito en el vestuario fue tremenda, pero el madrileño supo llenar ese hueco que dejó la marcha del grancanario: “Encontré a esa persona en Jaime. Ya teníamos una relación muy grande. Siempre ha estado conmigo. Me he apoyado mucho en él”.

Pese a que no le están saliendo bien las cosas en los partidos, Kirian destacó que Mata “entrena como un cabrón y compite como si fuese titular en todos los partidos”, una sed que alimenta al resto de la plantilla para creer en el trabajo de la plantilla y el cuerpo técnico.

Incluso desveló una anécdota tras el partido ante el Cádiz. “Cuando terminó el partido estuvimos 1-2 horas más en el vestuario hablando de fútbol y la vida. Tiene ansias de querer meterla. Confío muchísimo en él. Es de esas personas que se necesitan en el vestuario. Se merece que lleguen esos buenos momentos”, se deshizo en elogios el tinerfeño.

Los minutos no se sabe cuando le volverán a llegar, pero lo que Jaime Mata no dejará de mostrar es el compromiso y la profesionalidad de un veterano de 36 años que ha hecho de su escueto rol una virtud que transmitir a sus compañeros.

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