El rocoso liderato de Segunda: solidez defensiva y estudio del rival

En el sur de Madrid se empieza a soñar a lo grande. El Leganés aspira a regresar a la élite y lo hace con argumentos que van más allá a la clasificación, donde marcha líder. El principal responsable es Borja Jiménez, quien está construyendo un equipo con una gran solvencia defensiva (un muro muy difícil de superar, con 13 portería a cero) y siendo letal arriba (uno de los equipos que menos remates necesita para anotar). Todo ello mezclado con un estilo en el que trata de adaptarse al rival y buscar sus puntos débiles.

La clave, por muy básico que suene, está en el gol. Y ahí es donde destaca el Leganés. Porque es uno de los que mejor sabe hacerlo y de los que mejor se desempeñan para evitar que se los hagan. Los datos de Mediacoach, la herramienta que usan los entrenadores de Primera y Segunda para preparar los partidos, así lo avalan, como explica el analista de LaLiga Fabio Nevado: “El Leganés lidera el campeonato tanto en eficacia de finalización como en eficacia de evitación. Es un equipo que en ataque necesita muy pocas ocasiones para hacer gol. Y, en defensa, tiene datos opuestos: obliga a que le generen muchas situaciones para hacer uno”.

Los pepineros no están siendo un equipo que le guste amasar las jugadas y tener una posesión estéril. De ahí que apenas tengan el 45% del tiempo el balón (5º club de Segunda con menor porcentaje) y que sus posesiones más habituales sean cortas (menos de 10 segundos). “El Leganés está por debajo de la media de Segunda tanto en número de pases que promedia por posesión como en la velocidad que imprime en sus circulaciones”, apuntilla Nevado. De ahí, que los de Borja Jiménez recurran a la verticalidad. Es decir, pasan gran parte del partido defendiendo, cerca de su área y sin ejercer una presión ni ritmo de recuperación alta, solo esperan al momento adecuado de tener la oportunidad de lanzar un contragolpe. Donde son muy eficaces. Lo que les lleva a ser el tercer equipo que durante menos tiempo ha ido perdiendo y el 4º con más minutos por delante en el marcador. Juan Piñero, preparador físico del Leganés, da las claves de obtener esos números: “Se entrena mucho el tomar las decisiones adecuadas. El cuerpo técnico al completo analiza mucho al rival y se enfatiza en que no se nos escape nada. Prever lo que va a suceder en el campo y expone a los jugadores a los escenarios que creemos que se van a presentar”

Seguridad defensiva

Si se comparan los registros medios de Segunda con los del Leganés, los pepineros sobresalen por su eficacia en ataque. Aunque la verdadera clave está en su solvencia defensiva por la forma en la que juegan. Son un equipo que habitualmente juega con bloque bajo, cerca de su área, lo que propicia que sus rivales siempre se acerquen con facilidad hasta su área (son el tercer equipo con más pases del contrario en el último tercio del campo). Pero, a pesar de ello, el Leganés defiende muy bien. ¿Dejan acercarse más al rival? Sí. ¿Conceden ocasiones? Muy pocas. Ahí está la clave.

“Nosotros creemos en la variabilidad del jugador y lo que da cada uno en cada espacio. Por eso a veces cambiamos la estructura. Pero es dependiendo de los espacios que queremos proteger y atacar. Va a depender del rival. Sí usamos bastante las métricas y los datos para estudiar al contrario. Si tenemos información del rival no hay que desperdiciarla y protegernos. Lo intentamos explotar a través de los distintos perfiles de nuestros jugadores. Jugar con línea de cuatro o cinco defensas no es algo que nos preocupe, nos adaptamos absolutamente a todos”, explica Pedro Serna, analista del Leganés.

A pesar de tener al contrario remoloneando cerca de su portería, no logran sacar mucho fruto de esas situaciones, ya que es el equipo menos goleado de la categoría (16 tantos). El Leganés es el 12ª club que menos remates recibe y al que más hay que chutarle para hacer gol (encaja cada 20 disparos). “El Leganés está jugando con un bloque muy compacto, tratando de cerrar espacios interiores y con sus líneas muy juntas. Tiene el 4º dato más bajo del campeonato en profundidad posicional. También se está mostrando como un equipo estrecho, sin darle demasiada amplitud a sus jugadores de banda. Es el 6º equipo de la categoría con menor anchura posicional”, expone Nevado. Todo esto también se traduce en seguridad en las jugadas de estrategia: con cinco goles en contra (2 penaltis, 2 faltas y un córner), son el equipo que menos han encajado en acciones a balón parado. Algo a lo que hay que añadir el gran estado de forma de los porteros (un breve inicio para Jiménez y especialmente Conde) con 80,5% de paradas, Top-1 en Segunda.

Letal en ataque

El Leganés llega poco, pero cuando lo hace es casi sinónimo de gol. Son un equipo que recuperan poco en zonas adelantadas, lo que les dificulta todavía más crear ocasiones en campo rival. De ahí que sean el tercer equipo que menos dispara. Pero esa escasez la compensan con un gran acierto: son el club de Segunda que menos remates requiere para marcar (un gol cada 6,9 disparos), siendo el cuarto equipo más goleador de la categoría.

Gran parte de este éxito reside en a coralidad en ataque. El gol no es cosa de uno, sino de tres. Raba, Diego García y De la Fuente, con ocho dianas cada uno, comparten el título de pichichis del equipo. Aunque es Diego el que más lo intenta (51 remates). Raba, por su parte, destaca también por su facilidad para crear ocasiones: ya ha dado cuatro asistencias (aunque Portillo le supera con 6) y es el jugador del equipo que más pases da en el último tercio del campo y pases que propician un remate.

Constancia

Una de las claves del éxito pepinero está en su constancia. Lleva en lo alto de la clasificación desde la jornada 12. “En LaLiga Hypermotion es complicado mantener buenas dinámicas de resultados y es habitual pasar por rachas con dinámicas algo más negativas. Lo positivo del Leganés es que ha sido capaz de no perder durante este tipo de fases en las que no ha estado tan acertado”, apunta Fabio.

Han sabido mantener la mente fría cuando los resultados no acompañaban, como ha sucedido en estas últimas semanas. “Borja es un líder y tiene una gran capacidad para relativizar tanto la victoria como la derrota. A veces es muy difícil en el fútbol evaluar los procesos por encima de los resultados y él ha sido capaz de que todos vayamos en ese camino. Cuando ha ido muy bien que no haya euforia y cuando no ha ida tan bien, pues también se ha relativizado”, explica Pedro Serna. A lo que añade su compañero Piñero: “Si te pones a analizar, perdemos contra el Oviedo, que era una gran plantilla; empatamos contra el Valladolid, que es otra gran plantilla; y empatamos en casa del Levante, que es también una gran plantilla... Entonces Borja no hace un drama de una derrota y dos empates, sino que lo lee con total normalidad y apelando totalmente al sentido común y a la objetividad”.

No todo es perfecto y un camino de rosas en su misión de regresar en Primera. En sus últimos seis partidos como visitante solo ha ganado uno, pero es de destacar que aun así ha sabido sacar petróleo, ya que solo en dos ocasiones no logró rascar ningún punto. Es decir, el Leganés no es perfecto, pero sí está siendo el mejor, ya que nadie ha puntuado tanto esta temporada lejos de su estadio (21 puntos). Un factor fundamental para sustentar la candidatura pepinera a volver a Primera. Eso junto a su gran arma, el colectivo: “La clave está en el buen grupo que tenemos. Hay una armonía en la plantilla, es ambiciosa y optimista. Somos un equipo bastante compacto, con muchas ayudas defensivas y muy vertical. Seguramente las métricas que nos den mayor reconocimiento son las que hablan como equipo”, apunta Serna. “Para mí la clave es que son un equipo, 25 amigos. Sabes que lo que les pongas por delante lo van a hacer, que van a correr por el de al lado. Si me preguntasen por un jugador determinante tendría que decir el equipo”, finaliza.