Combate nulo entre Leganés y Oviedo en la noche de Butarque

Leganés y Oviedo empataron sin goles en la noche de Butarque y ambos se quedan como estaban. Los pepineros se consolidan en la parte alta de la clasificación y reafirman su papel de equipo revelación a pesar del pinchazo en casa. Los asturianos, mientras, siguen creciendo con Luis Carrión y enlazan tres partidos sin perder y dos sin encajar goles.

El partido comenzó accidentado. En un ataque visitante, Viti recibió un fuerte golpe en la mano, que obligó al árbitro Ávalos Barrera a parar el encuentro momentáneamente. De hecho, el jugador del Oviedo tuvo que recibir asistencia médica, aunque no tuvo problema en continuar jugando. Eso sí, con un vendaje en la muñeca. A partir de ahí, el Leganés, gracias a su buena presión, comenzó a dominar y a jugar en campo contrario. La defensa asturiana no era capaz de sacar el balón jugado y Leo Román comenzó a tener trabajo. Djouahra lo intentó dos veces y en las dos respondió sobriamente el portero. Especialmente buena fue la segunda intervención: un paradón a un disparo a bocajarro que, pleno de reflejos, envió a córner. Con el paso de los minutos, el Oviedo consiguió desplegarse algo en ataque, pero sin demasiado peligro. La única acción destacada fue un cabezazo de Borja Bastón, que se fue muy desviado.

En el inicio del segundo tiempo cambió la dinámica. El Oviedo pasó a tener el control del balón y eso hizo que el Leganés adoptara una pose más defensiva. Y le salió bien, porque Diego Conde apenas sufrió. Pasado el minuto 60, la afición que se desplazó a Butarque se puso en pie para aplaudir a rabiar a un campeón del Mundo. Santi Cazorla saltó al estadio pepinero (a la vez que Camarasa, que volvía a jugar después del parón por salud mental) que no visitaba desde 2019 con el Villarreal.

Los cambios dieron otro aire al choque. Tampoco fue algo drástico, pero al menos, se vieron algunas ocasiones. La más importante fue un remate al palo de Diego García tras un centro de Franquesa desde la izquierda. También hubo tiempo para los sustos. En una falta botada por Cazorla, Diego Conde y David Costas se dieron un choque tremendo que dejó a ambos doloridos, pero pudieron continuar. Los minutos se consumieron sin mucha más historia hasta el final. Combate nulo en Butarque que deja Leganés y Oviedo como estaban.

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