San Martín: “El momento físico es óptimo, otra cosa será después del Mundial”

José Luis San Martín, que durante 37 años trabajó como preparador físico del Real Madrid (los últimos ocho en el primer equipo) ha analizado lo que supondrá para los jugadores calzar un Mundial en mitad de la temporada: “Para empezar, los mundialistas van a llegar como tiros. El punto de forma de los jugadores en este momento, a finales de noviembre, es óptimo; otra cosa distinta será después del Mundial. Cuando llegue ese momento habrá que gestionar lo que queda de temporada de otra manera en cuanto a la duración y a la intensidad de los entrenamientos”.

Se paran los campeonatos con 14 jornadas disputadas de media y las competiciones europeas tras concluir la fase de grupos. Y llega el Mundial. “El 90% de los grandes equipos trabaja con dos objetivos: alcanzar los picos de forma a finales de noviembre y a primeros de abril. Por lo tanto, la mayoría de los mundialistas, que sobre todo juegan en Europa, van a llegar en un momento inmejorable. Pero luego hay que tener en consideración el desgaste físico y psicológico de un Mundial, que es mayor que el de otras competiciones. Hay que tener en cuenta que cuando un profesional, que va a la máxima intensidad, alcanza los 2.500 minutos de juego seguido, sin parones, el riesgo de lesión muscular aumenta un 28%”.

Para el profe San Martín, las dificultades físicas de los jugadores pueden llegar tras la Copa del Mundo, pero entiende que hay métodos para minimizar riesgos: “La gestión de los entrenamientos debe adecuarse al esfuerzo de los jugadores. Tras el Mundial no podrán ser tan intensos ni tan duraderos como si hubiera sido una temporada normal. La mayoría necesitará bajar los minutos de trabajo y subir los de descanso, porque el desgaste en la Copa del Mundo va a ser grande”.

Entiende este prestigioso especialista que “el de Qatar va a ser un Mundial muy físico, y los jugadores que tienen más despliegue lo notarán más. Valverde, por ejemplo, es un portento físico capaz de alcanzar picos de velocidad máximos de 37,5 km/h. Aunque su capacidad de recuperación es enorme por tener un 20% más de ‘fibra rápida’ que el resto, lógicamente notará esos esfuerzos. Como también, por ejemplo, jugadores como Mbappé, que es el más rápido con picos de velocidad de 39,3 km/h. También tendrá un desgaste durante el Mundial que luego puede aflorar en el resto de campaña”. Para San Martín, “todo se irá viendo cuando regresen a sus clubes. Los controles físicos y las analíticas marcarán el camino a seguir para evitar que aumente el riesgo de lesiones por la fatiga acumulada”.