Real Madrid: comienza la cuenta atrás

Comienza la cuenta atrás. Aunque a Carlo Ancelotti no le guste y tuerza el gesto cuando se le pregunta si ya se ve campeón. Cierto es que el Madrid comienza este tramo final de la temporada mirando a sus perseguidores por el retrovisor. Aún quedan 13 jornadas para el final del campeonato, pero la distancia que tiene con respecto a sus rivales en la lucha por el título le hace ser dueño de su destino: los blancos tienen una diferencia de seis puntos con el Girona, segundo en la tabla y que ha visto cómo en dos semanas, los blancos se escapaban de su estrecho marcaje: las derrotas en el Santiago Bernabéu y en San Mamés han hecho que los gironís miren más ahora a su espalda que hacia adelante. Por detrás de los de Michel aparece un Barcelona que ya ha avisado Xavi que hasta que sea matemáticamente imposible va a seguir peleando por renovar la Liga: está a dos puntos de sus vecinos catalanes... y a ocho de los blancos, con futura visita al Bernabéu en abril. Al fondo, en cuarta posición está el Atlético de Madrid, a 11 puntos.

Con esa diferencia de puntos, y a 13 jornadas del final, el Madrid depende de sí mismo para no perder la que sería la Liga número 36, la novena de este siglo XXI. Repasando las trayectorias del equipo blanco en las cuatro últimas Ligas, los de Ancelotti deben seguir con el pie en el acelerador para culminar lo antes posible este nuevo título. Hasta el momento, los madridistas llevan un campeonato espléndido: una sola derrota en 25 jornadas (3-1 ante el Atlético, en la jornada 6), cinco empates y 19 victorias, con 53 goles marcados (sólo se ha quedado sin marcar en una ocasión, ante el Rayo en el Bernabéu) y apenas 16 encajados. Esta está siendo la gran baza del equipo blanco, que se ha fortalecido y dado la cara pese a la plaga de lesiones que ha tenido a lo largo de la temporada.

Repasando las 13 últimas jornadas de las cuatro últimas temporadas en las que el Madrid ganó la Liga, en tres de las mismas (2010-2011, 2016-2017 y 2019-20), los blancos ganaron 10 de los 13 últimos encuentros. Hay que señalar que en la campaña 2016-17, los blancos disputaron la jornada 21 entre la penúltima y última jornada, pero los de Zidane llegaban lanzados y no dieron pie al Celta (ganaron 1-4 en Balaídos). Esa campaña, junto con la 2019-2020, vieron cómo los blancos vencían en 11 de sus encuentros, con un empate y una derrota en cada una de ellas. Formidable fue el final de la temporada 2019-20: la jornada 26 vio cómo el Madrid derrotaba al Barcelona (2-0) en el Santiago Bernabéu, pero la pandemia del Coronavirus retrasó la competición hasta los meses de junio y julio con un escenario completamente diferente: el estadio Alfredo Di Stéfano. Los blancos se hicieron fuertes en su sede de Valdebebas, donde jugaron seis encuentros (todos triunfos), con 13 goles a favor (más de dos goles por encuentro), con sólo dos goles encajados (cuatro porterías a cero). En total fueron siete porterías sin encajar goles en ese tramo competitivo. Otro ejemplo: con Mourinho, en la Liga de los 100 puntos y 121 goles, los blancos alcanzaron la decena de victorias, con dos derrotas, en este tramo final de campeonato.

A los blancos les queda un calendario que, a priori, parece asequible, pero sus cuatro próximas salidas son potentes: Valencia, Osasuna, Mallorca y Real Sociedad. Aún les quedará viajar a Granada y a Vila-real. En casa, por el contrario, donde se ha mostrado infalible e invicto en el presente curso liguero, con 10 triunfos y dos empates, recibe al Sevilla (con Quique, su tercer entrenador en la campaña, vienen de sumar siete de los nueve últimos puntos), Celta, Athletic, Barcelona, Cádiz, Alavés para cerrar la campaña ante el Betis.

De seguir con esa dinámica ganadora, los blancos alzarían el título con tiempo por delante. Pero nadie quiere recordar un mal precedente: en la campaña 2003-04, con Carlos Queiroz en el banquillo, los blancos fueron líderes destacados hasta el tramo final: en las 13 últimas jornadas sólo ganaron cuatro partidos, perdiendo siete, cinco de manera consecutiva en las cinco últimas jornadas, con sólo cinco goles marcados en esas cinco últimas jornadas y 10 encajados... Por eso, Ancelotti, astuto, no se fía y no quiere lanzar las campanas al aire: quiere ir partido a partido.