Ramírez: “Me veo con capacidad para cambiar las cosas”
El técnico dice que no encuentra una explicación al rendimiento de su equipo pero “puede ser la falta de tensión competitiva”.
Miguel Ángel Ramírez estaba contrariado y hasta molesto con la estrepitosa derrota de su equipo frente a la Deportiva Ponferradina. “No encuentro explicaciones al partido, pero puede ser la falta de tensión competitiva”, dijo el entrenador del Sporting que mira al futuro y afirma estar en condiciones de mejorar al equipo. “Me veo con capacidad para cambiar las cosas”, dijo en la sala de prensa de El Molinón.
“Este partido nos dice dónde estamos y no estamos donde merece el Sporting. No estamos en el nivel competitivo que requiere este club”, apuntó Ramírez que anunció para este lunes la toma de las primeras decisiones para comenzar a armar la próxima plantilla. El técnico avanzó que habrá rueda de prensa del presidente ejecutivo David Guerra para hacer balance de la temporada y, se espera, haga públicas esas primeras decisiones.
“La realidad nos dice que hace falta una revolución en el Sporting”, insistió el entrenador, una idea que ya expuso en la rueda de prensa del pasado viernes. Ahora bien, como en aquella ocasión, matizó que “las reglas del juego no permiten tanto margen de maniobra en un solo mercado y vamos a realizar los cambios siendo inteligentes sobre las piezas que vamos a incorporar”. Y en este sentido tiene claro que “hay que acertar” y, “lo que venga, debe mejorar lo que tenemos”.
De nuevo refiriéndose al lamentable partido, Miguel Ángel Ramírez recalcó que “esto no puede pasar en ningún partido porque se representa al Sporting”. El técnico señaló a sus futbolistas, aunque pidió que no se malinterpretarán sus palabras. “Da igual que acabes contrato, que te vayas, pero lo hemos hablado y, si te descuidas, cualquier equipo te hace esto”, recordó.
De cara al futuro, Miguel Ángel Ramírez es consciente de que tiene que encontrar la fórmula para que el equipo sea “competitivo de manera más habitual”. El técnico lo considera un reto porque sabe que “esta afición está cansada de escuchar cosas y el Sporting les da desde hace años motivos para el enfado”.
Entonces recordó el papel que asumió cuando aceptó la oferta para trabajar en Gijón. “Sabía que había una exigencia alta en un histórico en esta situación. Lo vi como un reto venir al Sporting y sabía que venir aquí era un riesgo”, dijo.
Y añadió: “Sé que hay gente que piensa que no empaté con nadie. Pero quien me preocupa es el que trabaja conmigo en el día a día. No me interesan las opiniones de la gente de fuera, porque no tienen capacidad de juicio para valorarme como entrenador en el día a día”.