Raba en el espejo de Omar Ramos
Como le pasó al canario en el curso del ascenso del Leganés, Raba también ha disparado sus números ofensivos. Ya suma cinco dianas, su tope en Segunda.
Dani Raba es jugador desatado. Nada nuevo en la atmósfera que rodea a este Leganés líder, capaz de convertir en ciclón todo lo que toca. Y Raba lo es. Con el gol que le hizo al Cartagena el pasado domingo (el 0-3 después del doblete inicial de Miguel de la Fuente) suma ya cinco dianas, igualando su mejor registro en toda una temporada. En aquella ocasión fue en el Huesca, cuando logró cinco tantos en 24 partidos, pero con la diferencia de que entonces sólo dio una asistencia y ahora suma ya tres. Esto es, ya ha participado en ocho goles para ser referente más allá de lo que de él se esperaba. Una mutación en la que se mira en el espejo de Omar Ramos.
Porque algo parecido le sucedió al jugador canario en la temporada 2015-2016, cuando el Leganés ascendió a Primera División y lo hizo con este extremo (zurdo también pero con querencia a jugar por la derecha, como Raba) luciendo cifras ofensivas muy por encima de lo que había exhibido en equipos anteriores. De hecho el ahora futbolista del Golukam indio sólo había marcado dos goles. Uno con el Huesca en la 11-12 y otro en la 12-13 con el Valladolid.
Pero aterrizado en Butarque, Asier Garitano explotó su vis ofensiva y lo convirtió en pieza clave del histórico ascenso. Ese curso Omar sumó seis goles. Alguno de recuerdo eterno, como el que le hizo al Córdoba en una remontada (2-3) que sirvió como hito a partir del cual el Leganés se creyó que el ascenso no era quimera imposible, sino una realidad. Por cierto, Omar, como ahora Raba, tenía 28 años en aquel momento. Casualidades hasta en el DNI.
Mirada al mercado
Sea como fuere, ahora Raba apunta a superar aquel registro de Omar (lógico, tiene más gol que en su momento el canario) para ejercer una función similar: la de catalizador ofensivo de un equipo en el que se entiende a las mil maravillas con Miguel de la Fuente. Juntos conforman una dupla ocasional (no siempre juegan juntos) potente. Porque si Raba ya ha participado en ocho goles, Miguel le imita aunque con reparto diferente: siete goles para el pucelano con una asistencia de gol.
En este estado de plenitud, es inevitable no mirar al mercado de fichajes, tanto invernal como estival. Raba es, de los futbolistas en propiedad del Leganés, quizá una de las piezas más apetecibles. Termina contrato en 2024 y, de cuál sea el recorrido del Leganés, puede depender su continuidad o no al sur de Madrid. Un hipotético ascenso ayudaría. De lo contrario, será más complicado. Pero para eso queda tiempo. Entre tanto, en Butarque siguen disfrutando de un futbolista capital en ataque, líder ofensivo en el espejo de Omar Ramos, héroe del ascenso.
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